España cerró 2008 con un récord histórico de 3,1 millones de desempleados, la cifra más alta desde enero de 1996, fecha desde la que se elabora la actual serie histórica con datos comparables.

En diciembre, el desempleo aumentó en casi 140.000 personas respecto a noviembre, lo que equivale a un incremento de cerca del 4,7 por ciento, según indicó el ministerio de Trabajo en Madrid.

Los datos hechos públicos hoy, a los que tuvo acceso el diario La Nación, suponen que en 2008 se contabilizaron casi un millón de desocupados más que el año anterior, lo que representa una subida de casi el 47 por ciento.

La crisis. Las cifras demuestran el duro impacto que tuvo en el mercado laboral español el desplome del sector inmobiliario y el de la construcción, situación que se vio agravada por la crisis financiera internacional.

Precisamente, en diciembre el desempleo subió sobre todo en el sector de la construcción, con un aumento de casi 71.000 personas (+13,6%), seguido del sector servicios, con un incremento de 46.471 personas (+2,7%) y la industria, con 27.725 personas (+7,5%) más.

La crisis también golpea duramente a los inmigrantes, ya que en el conjunto del año se contabilizaron alrededor de 200.000 extranjeros sin trabajo más que en 2007, lo que deja un total de 410.000 desempleados en este colectivo a finales de 2008. Tan sólo en diciembre, el aumento respecto al mes anterior fue del 8,25 por ciento.

De acuerdo con los más recientes datos de la oficina europea de estadística Eurostat, España es el país con más desocupados en la zona del euro, ya que la tasa asciende al 12,8 por ciento.

Los expertos pronostican que la situación irá a peor en 2009 y que el desempleo podría llegar a afectar a unos cuatro millones de personas a lo largo de este año.