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Diez momentos de un 2008 con Cristina en la Casa Rosada
La llegada de Cristina Kirchner al poder despertó esperanzas para millones de argentinos. Cuáles fueron los 10 momentos clave de su primer año de Gobierno
31 de diciembre de 2008
Por Gabriela Granata
1- Día de Asunción
Cristina Kirchner dijo en su primer discurso ante el Parlamento: "Espero profundizar este rol del Congreso, donde podamos discutir y debatir sin agravios, con propuestas alternativas y viables". Lo cierto es que no aceptó debates parlamentarios, y forzó hasta el límite a sus propios legisladores para que aprobaran las normas. Un ejemplo y el comienzo de un cambio fue la resolución 125, que atrapó al Gobierno en su propia telaraña. A partir de allí comenzó un trabajo más delicado de búsqueda de acuerdos.
En otro tramo del discurso señaló: "No he venido para convertirme en gendarme de la rentabilidad de los empresarios”: Las empresas que cotizan en Bolsa tuvieron una ganancia de 12 mil millones de pesos. Y las empresas de alimentos, tuvieron ganancias un 20 por ciento superiores. Mientras tanto, el Gobierno aplicaba la receta del disimulo, del apriete de Guillermo Moreno.
2- El gendarme de los precios, Guillermo Moreno
Inflación- Los modos son sólo una excusa, la ineficiencia para contener los precios quedó en evidencia cuando la inflación se retrajo sólo por la recesión preventiva post crisis mundial. De una proyección de entre el 25 y el 30 por ciento a principios de año, los consultores privados la redujeron a alrededor del 20 por ciento. Claro que para el Gobierno y el Indec no supera el 10 por ciento. Y ya se anuncian para este inicio de año nuevas subas en segmentos que impactan en la clase media.
3- El poder sindical
En su discurso de asunción Cristina dijo que no fue elegida “para ser parte de una interna sindical o política". Hugo Moyano le salió a contestar que lo iba a encontrar en "la vereda de enfrente" si se afectaba el interés de los trabajadores. Cristina lo desafió mostrándose con Gerardo Matinez pero Néstor Kirchner nunca dejó de apoyar a Moyano. El año cierra con esa alianza K-Moyano consolidada, y con los sindicatos obteniendo más recursos para el cuestionado manejo de las obras sociales. Este año el Gobierno necesita que los sindicatos no generen conflictos. Es un año electoral.
Una módica compensación porque no se otorgó el plus salarial que había pedido Moyano. En 2007, casi 1,5 millón de trabajadores recibieron una suma fija adicional de entre 120 y 3.000 pesos como gratificación por fin de año o como compensación por el desfase salarial ocasionado por la mayor inflación. Este año 2008 fue de 200 pesos y sólo para la escala de ingresos mínimos.
4- Consumo
Compras: fin de año en shoppings : En 2007 hubo un crecimiento de ventas de ventas
del 35 % y hasta se anunció a principios de 2008 la apertura de veinte centros comerciales en todo el país con inversiones por más de 1.200 millones de dólares. El año que se fue terminó con sobreofertas de descuentos por falta de compradores.
5- El anuncio del año
Lamparita. El recambio de lamparitas por las de bajo consumo fue un anuncio con bombos y platillos, el primero de la era Cristina. No se sostuvo y se vivió un verano con cortes de luz y falta de agua. Habrá que ver este verano.
6 – El conflicto del año
Comenzó como una imposición más de políticas de exportaciones sobre el agro. El intento de sobre aprovechar los recursos de las exportaciones, esta vez le jugó en contra. Las entidades del campo sortearon diferencias y pudieron instalar el discurso de la apropiación indebida de recursos. Las retenciones móviles se llevaron puesto al ministro de Economía, Martín Lousteau.
7- La figura del “mellizo” De Angeli
La figura híper mediática de Alfredo De Angeli le dio oxígeno extra a la protesta del campo. La Mesa de Enalce hizo una buena jugada de movilización y de recursos creativos para sostener los cuestionamientos. El Gobierno respondió con crispación, críticas –“el piquete de la abundancia”, dijo Cristina-, el ánimo “destituyente”, el golpismo, para Néstor. La sorpresa la dio Julio César Cleto Cobos al votar en contra de la línea del Gobierno. Esa actitud le valió el congelamiento de la relación con el matrimonio K pero el apoyo de la opinión pública. Igual, quedó en la encerrona de definir su posicionamiento electoral.
8- Las alianzas políticas
Para el Gobierno fue un año de pura pérdida. Agudizó el enfrentamiento con el duhaldismo, que estaba por lo menos dormido. Perdió a sectores más independientes del peronismo, como Felipe Solá, como Carlos Reutemann, figuras que tienen buena imagen y son siempre posibles candidatos. El Gobierno quedó encerrado en la trama de gobernadores e intendentes del “Sí, Néstor”. Tuvo una relación oscilante y poco clara con Luis D`Elía a quien echó primero del gobierno pero luego tomó como primera espada para pulsear con el campo.
Los sectores de centroizquierda y piqueteros se alejaron del Gobierno: encontraron que la vuelta al peronismo de Néstor reducía las chances de una “Concertación Plural” y las propuestas sociales que hicieron fueron automáticamente desechadas. Los radicales K partieron hacia otras sombras más amigables
9- La oposición
Mauricio Macri, Elisa Carrió. Esos dos dirigentes monopolizaron la polarización con el kirchnerismo con diferentes estilos y por distintos motivos. Macri, desde la gestión porteña, pulseó por recursos y recién a fin de 2008 avanzó en temas nacionales. Carrió volvió a preparar el terreno para las elecciones 2009 con denuncias altisonantes contra los Kirchner y acuerdos ruidosos con la UCR y el Socialismo, con expectativas de sobrevida. La renovación parlamentaria de 2009 es el punto de inflexión del gobierno que le va a marcar el oxígeno que tiene para finalizar la gestión.
10 – Los desafíos del matrimonio
La calidad institucional, mejoras reales para los sectores más pobres y el fin del clientelismo que el Gobierno no impulsó nunca son los grandes desafíos políticos para un Gobierno que siempre declamó que venía a sentar las bases de otro país.