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El financiamiento se desacelerará en el 2009
Lo admitió el Banco Central. Este año, los préstamos privados terminarán mostrando un crecimiento del 23%. Los plazos fijos aumentarán apenas entre 6 y 8%
15 de diciembre de 2008
Desde el momento en que el Gobierno anuncia un paquete de medidas “anticrisis” queda claro que para el 2009 las autoridades ya prevén (o temen) una desaceleración de la actividad económica. Y el Banco Central (BCRA) no es la excepción. En el Programa Monetario 2009, algo así como la hoja de ruta de la autoridad monetaria para el año que comienza, se proyecta que el crédito al sector privado crecerá el próximo año cerca de un 15%, esto es casi ocho puntos porcentuales menos de lo que se estima terminará aumentando en 2008.
Ya en el último trimestre de este año, el financiamiento al sector privado muestra una tendencia a la baja. Con la crisis internacional y la incertidumbre de la economía local, las tasas de interés activas (de los créditos) se recalentaron y para muchos individuos endeudarse dejó de ser una alternativa.
Al mismo tiempo, los bancos se empezaron a mostrar mucho más celosos de la liquidez, como consecuencia del menor crecimiento de sus depósitos, la materia prima para todos los créditos. Según datos del Banco Central (BCRA), los plazos fijos en pesos del sector privado cayeron $ 3.352 millones (o 5,12%) desde mediados de septiembre, cuando se exacerbó el pánico en Wall Street con la caída de Lehman Brothers, hasta el 5 de diciembre, última fecha disponible. En contrapartida, los ahorristas eligieron volcarse en cuentas a la vista (unos $3.400 millones) y el dólar, que en el mismo período pasó de cotizarse a $ 3,09 a $3,42.
Pero, para el año que viene, en el BCRA no son demasiado optimistas con respecto a un cambio de tendencia. De acuerdo con el proyecto de Programa Monetario que entre hoy y mañana seguirá siendo ajustado por el Directorio de la entidad, los plazos fijos en pesos del sector privado crecerán entre el 6 y el 8% en 2009, esto es entre $3.700 y $ 5.000 millones.
Con la estatización de las AFJP, los técnicos del Central reconocen que el crecimiento de los depósitos a plazo del sector privado quedará bastante acotado. Aunque el sector público, en particular, la ANSeS tendría la responsabilidad de suplir gran parte del crecimiento de las colocaciones del sistema financiero. Se espera que el año que viene los plazos fijos del sector público trepen más del 23%, por lo que sumados los depósitos públicos y los privados, los bancos tendrían un crecimiento de las colocaciones del orden del 15%.
Según el Boletín Estadístico del BCRA, al tercer trimestre de 2008, las personas físicas eran titulares del 47,3% de los saldos constituidos a plazo fijo en pesos del sector privado no financiero y del 88,4% de los certificados. De las imposiciones de individuos, cerca de 65,3% eran de menos de $ 20.000.
Si bien el titular del BCRA, Martín Redrado, tenía previsto presentar mañana su Programa Monetario 2009 en la comisión de Finanzas del Senado, la necesidad de privilegiar el tratamiento de algunos de últimos proyectos impulsados por la presidenta, Cristina Fernández de Kirchner, como la eliminación de la “tablita de Machinea”, postergaría la exposición. El Programa también prevé un crecimiento de la economía del 3%, un incremento del M2 (los depósitos a la vista del sector privado y el dinero en circulación) del orden del 17%, y un superávit de la balanza comercial de u$s 6.000 millones.
Ya en el último trimestre de este año, el financiamiento al sector privado muestra una tendencia a la baja. Con la crisis internacional y la incertidumbre de la economía local, las tasas de interés activas (de los créditos) se recalentaron y para muchos individuos endeudarse dejó de ser una alternativa.
Al mismo tiempo, los bancos se empezaron a mostrar mucho más celosos de la liquidez, como consecuencia del menor crecimiento de sus depósitos, la materia prima para todos los créditos. Según datos del Banco Central (BCRA), los plazos fijos en pesos del sector privado cayeron $ 3.352 millones (o 5,12%) desde mediados de septiembre, cuando se exacerbó el pánico en Wall Street con la caída de Lehman Brothers, hasta el 5 de diciembre, última fecha disponible. En contrapartida, los ahorristas eligieron volcarse en cuentas a la vista (unos $3.400 millones) y el dólar, que en el mismo período pasó de cotizarse a $ 3,09 a $3,42.
Pero, para el año que viene, en el BCRA no son demasiado optimistas con respecto a un cambio de tendencia. De acuerdo con el proyecto de Programa Monetario que entre hoy y mañana seguirá siendo ajustado por el Directorio de la entidad, los plazos fijos en pesos del sector privado crecerán entre el 6 y el 8% en 2009, esto es entre $3.700 y $ 5.000 millones.
Con la estatización de las AFJP, los técnicos del Central reconocen que el crecimiento de los depósitos a plazo del sector privado quedará bastante acotado. Aunque el sector público, en particular, la ANSeS tendría la responsabilidad de suplir gran parte del crecimiento de las colocaciones del sistema financiero. Se espera que el año que viene los plazos fijos del sector público trepen más del 23%, por lo que sumados los depósitos públicos y los privados, los bancos tendrían un crecimiento de las colocaciones del orden del 15%.
Según el Boletín Estadístico del BCRA, al tercer trimestre de 2008, las personas físicas eran titulares del 47,3% de los saldos constituidos a plazo fijo en pesos del sector privado no financiero y del 88,4% de los certificados. De las imposiciones de individuos, cerca de 65,3% eran de menos de $ 20.000.
Si bien el titular del BCRA, Martín Redrado, tenía previsto presentar mañana su Programa Monetario 2009 en la comisión de Finanzas del Senado, la necesidad de privilegiar el tratamiento de algunos de últimos proyectos impulsados por la presidenta, Cristina Fernández de Kirchner, como la eliminación de la “tablita de Machinea”, postergaría la exposición. El Programa también prevé un crecimiento de la economía del 3%, un incremento del M2 (los depósitos a la vista del sector privado y el dinero en circulación) del orden del 17%, y un superávit de la balanza comercial de u$s 6.000 millones.