Los bancos habrían encontrado la salida efectiva para hacer realidad la idea impulsada por el secretario de Comercio Interior, Guillermo Moreno, quien desde un comienzo pretendió que la persona que hoy alquila una propiedad pague por mes el mismo importe en la cuota de un hipotecario.

Según publicó Infobae, lo informó una alta fuente de una de las entidades que adhirió al proyecto de ley que el Poder Ejecutivo envió la semana pasada al Congreso para que el inquilino sea un nuevo sujeto de crédito.

Por ejemplo, si paga $1.000 por mes por alquilar y la cuota que el banco le tendría que cobrar por sacar un crédito para comprar esa misma propiedad asciende a $1.600, el banco se comprometería a cobrarle sólo $1.000 mensuales, dejando los restantes $600 para que capitalicen en el saldo de la deuda.

Esto significa que, al final del período originalmente pactado, el deudor deberá continuar pagando por un plazo adicional, hasta cubrir el remanente de deuda que fue acumulando por los $600 durante los años del crédito.

Además, según detalló la fuente, los créditos otorgados por las 13 entidades que adhirieron al proyecto de ley serán a tasa fija y cada banco tendrá la libertad de definir tanto el interés que cobrará por el préstamo como el plazo.Por otro lado, la cuota podrá ser ajustada por el valor de la propiedad, sólo en el caso de que el inmueble aumente de precio.

En cuanto al otorgamiento de leasing, los bancos aplicarán el mismo modelo que usarán para los nuevos créditos hipotecarios, de modo que la cuota sea similar a lo que hoy paga un inquilino por el alquiler.

Así, la diferencia entre lo que le debería cobrar el banco y lo que el inquilino pagará como cuota también se capitalizará en el saldo de la deuda. El inmueble será propiedad de los bancos hasta que el inquilino decida si ejerce la opción a compra o no.

El monto que destinará cada banco para financiar esta nueva línea de crédito quedará a criterio de cada entidad.