España, herida por la ausencia de su astro Pau Gasol, cicatrizó a fuerza de garra, defensa y buena puntería para coronarse con un triunfo 70-47 sobre Grecia en la final del mundial de básquetbol.

Es el primer campeonato mundial de España, cuyo mejor resultado era un cuarto lugar en 1982. Grecia, actual rey de Europa, también mejoró el cuarto puesto que alcanzó en dos mundiales anteriores.

Gasol, pilar de la selección, vio el partido desde desde el banco, luego de fracturarse el pie izquierdo en la semifinal contra Argentina.

Aunque no tocó un solo balón, el centro de los Grizzlies de Memphis fue figura clave en la victoria. Sus compañeros salieron con camisetas que leían "Pau también juega", y una vez se lanzó la pelota al aire, batallaron como si lo tuvieran al lado en uniforme.

Jorge Garbajosa y Juan Carlos Navarro se pusieron la capa de salvadores y acertaron de todos los ángulos. De afuera del perímetro, en penetraciones, con defensores cerca y lejos.

Garbajosa, delantero fuerte que fichó con los Raptors de Toronto para la próxima campaña de la NBA, logró 20 puntos, con seis triples, incluyendo 11 tantos en la primera mitad. Navarro aportó 20 y coló cuatro de nueve bombazbotes.



Los griegos apenas acertaron el 33% de sus intentos y fallaron 16 de 21 triples.

Síntesis

47 - Grecia (12+11+11+13): Diamantidis (4), Hatzivretas (-), Kakiuzis (17), Fotsis (7), Papadopoulos (2) -cinco inicial-, Spanoulis (4), Tsartsaris (-), Schortsianitis (2), Papaloukas (10), Dikudis (1) y Vasilopulos (-).

70 - España (18+25+11+16): Calderón (7), Navarro (20), Jiménez (4), Reyes (10), Garbajosa (20) -cinco inicial-, Marc Gasol (2), Berni Rodríguez (6), Mumbrú (-), Cabezas (1), Fernández (-) y Sergio Rodríguez (-).