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Cristina habló de "Efecto Jazz"
"Hoy la crisis arranca en la primera potencia", dijo la presidenta argentina al hablar ante la Asamblea de la ONU. "Antes nos decían que el mercado todo lo arreglaba", disparó
23 de septiembre de 2008
Ante la Asamblea General de Naciones Unidas, la presidenta Cristina Kirchner formuló hoy una fuerte crítica a Estados Unidos por haber defendido un "modelo económico de ficción" y pidió que la crisis en ese país sirva para "revisar comportamientos y políticas" a nivel mundial.
Cristina Kirchner definió al cismo financiero mundial desencadenado en la primera potencia mundial como "efecto jazz" y aprovechó para condenar al gobierno de ese país por defender "un modelo económico que centró en la economía de ficción y en el
mundo de las finanzas la generación de riqueza".
"Hoy ya no pueden hablar del efecto caipirinha, tequila o arroz, que siempre denotaba que la crisis venía de los países emergentes hacia el centro. Hoy, si tuviéramos que ponerle un nombre (a la crisis) tal vez sería el efecto jazz , que va desde el centro de la primera economía del mundo y se expande", enfatizó la mandataria.
En el atril reservado a los jefes de Estado, la jefa de Estado aseguró que no se ponía contenta por la actual crisis financiera de Estados Unidos pero consideró que se trata de una oportunidad histórica para "revisar comportamientos y políticas".
"Se nos dijo a los países de la América del Sur durante la vigencia del Consenso de Washington que el mercado todo lo solucionaba, que el Estado no era necesario" y que "el intervencionismo estatal eran nostalgias de grupos que no habían comprendido como había evolucionado la economía", recreó.
Sin embargo, sostuvo que "la intervención estatal más formidable de la que se tenga memoria" se produce "precisamente desde" Estados Unidos, "del lugar desde donde nos habían dicho que el Estado no era necesario".
Aludió así al salvataje financiero propuesto por la administración de George W. Bush, que debe ser aprobado por el Congreso estadounidense.
Además, al evaluar el caso de la crisis norteamericana, Cristina Krichner consideró que "no va a venir ninguna calificadora de riesgo ni el Fondo Monetario Internacional a decir qué tiene que hacer este gran país".
Por otra parte, mencionó que la propuesta de reapertura del canje de deuda que recibió la Argentina se da en "condiciones más favorables" para el país que las obtenidas en 2005.
La escuchaban desde el sector reservado a la delegación argentina, el ex presidente Néstor Kirchner, el canciller Jorge Taiana, el secretario Legal y Técnico Jorge Zannini, el vocero o presidencial Miguel Núñez y el embajador argentino ante la ONU,
Jorge Argüello.
En ese marco, Cristina Kirchner destacó que la Argentina "de seguir creciendo a las tasas como lo hecho desde el 2003, este año cumpliría el ciclo económico más importante de sus casi 200 años de historia".
Atribuyó entonces la expansión a "la presencia de un Estado", porque consideró que "el mercado no asigna recursos a los sectores más vulnerables".
Por otra parte, precisó que Argentina en 2003 "endeudada en el 160 por ciento del PBI, hoy ha reducido sus deudas al casi 50 por ciento del PBI", y recordó que se pagó "íntegramente la deuda al Fondo Monetario Internacional".
También mencionó como parte de una política de "desendeudamiento" la decisión de saldar los compromisos con el Club de París".
Cristina Kirchner definió al cismo financiero mundial desencadenado en la primera potencia mundial como "efecto jazz" y aprovechó para condenar al gobierno de ese país por defender "un modelo económico que centró en la economía de ficción y en el
mundo de las finanzas la generación de riqueza".
"Hoy ya no pueden hablar del efecto caipirinha, tequila o arroz, que siempre denotaba que la crisis venía de los países emergentes hacia el centro. Hoy, si tuviéramos que ponerle un nombre (a la crisis) tal vez sería el efecto jazz , que va desde el centro de la primera economía del mundo y se expande", enfatizó la mandataria.
En el atril reservado a los jefes de Estado, la jefa de Estado aseguró que no se ponía contenta por la actual crisis financiera de Estados Unidos pero consideró que se trata de una oportunidad histórica para "revisar comportamientos y políticas".
"Se nos dijo a los países de la América del Sur durante la vigencia del Consenso de Washington que el mercado todo lo solucionaba, que el Estado no era necesario" y que "el intervencionismo estatal eran nostalgias de grupos que no habían comprendido como había evolucionado la economía", recreó.
Sin embargo, sostuvo que "la intervención estatal más formidable de la que se tenga memoria" se produce "precisamente desde" Estados Unidos, "del lugar desde donde nos habían dicho que el Estado no era necesario".
Aludió así al salvataje financiero propuesto por la administración de George W. Bush, que debe ser aprobado por el Congreso estadounidense.
Además, al evaluar el caso de la crisis norteamericana, Cristina Krichner consideró que "no va a venir ninguna calificadora de riesgo ni el Fondo Monetario Internacional a decir qué tiene que hacer este gran país".
Por otra parte, mencionó que la propuesta de reapertura del canje de deuda que recibió la Argentina se da en "condiciones más favorables" para el país que las obtenidas en 2005.
La escuchaban desde el sector reservado a la delegación argentina, el ex presidente Néstor Kirchner, el canciller Jorge Taiana, el secretario Legal y Técnico Jorge Zannini, el vocero o presidencial Miguel Núñez y el embajador argentino ante la ONU,
Jorge Argüello.
En ese marco, Cristina Kirchner destacó que la Argentina "de seguir creciendo a las tasas como lo hecho desde el 2003, este año cumpliría el ciclo económico más importante de sus casi 200 años de historia".
Atribuyó entonces la expansión a "la presencia de un Estado", porque consideró que "el mercado no asigna recursos a los sectores más vulnerables".
Por otra parte, precisó que Argentina en 2003 "endeudada en el 160 por ciento del PBI, hoy ha reducido sus deudas al casi 50 por ciento del PBI", y recordó que se pagó "íntegramente la deuda al Fondo Monetario Internacional".
También mencionó como parte de una política de "desendeudamiento" la decisión de saldar los compromisos con el Club de París".