El jefe de Gabinete, Sergio Massa, sorprendió al señalar que "no se prevé reabrir el canje de deuda antes de 2010" para darle una solución a los bonistas.

Es que fue primera alusión sobre este espinoso tema que formula un funcionario
kirchnerista.

La frase de Massa deja ciertas intrigas como si realmente existe alguna voluntad del actual Gobierno para ofrecerle una solución a los holdouts, los tenedores de bonos que quedaron afuera del canje.

O si, por el contrario, que en 2010 se pueda iniciar una etapa de negociaciones para que el tema lo resuelva el gobierno que nazca de las elecciones de 2011.

Massa confirmó en la presentación del Presupuesto 2009 que no se reabrirá el canje de deuda y, por ahora, disipó los rumores contrarios.

El Gobierno ratificó que no tiene en sus planes volver a negociar con los bonistas que quedaron fuera del canje de deuda que impulsó la administración de Néstor Kirchner.

Massa dijo que "hasta 2010" no está previsto que se reabra el canje de deuda para los bonistas extranjeros.

Días atrás, el ministro del Interior, Florencio Randazzo, había indicado: "Ya se dijo durante el anterior Gobierno que quienes no entraron en su momento (en la reestructuración de la deuda) se olvidasen. Es una situación saldada para nosotros".

Los tenedores de bonos que no entraron en el canje de la deuda -denominados holdouts- mantienen en conjunto títulos públicos por unos 31 mil millones de dólares, casi la cuarta parte del total de papeles reestructurados.