La Argentina es "el país de la joda". Lo dice la calle, lo sostiene la gente, no se respetan muchas libertades y todo el mundo protesta por todo.

Ahora los colectivos se concentrarán este martes, entre las 10 y las 12, frente a la sede del gobierno porteño para reclamar que los taxis vacíos no circulen por los carriles exclusivos.

Antes lo habían hecho los "tacheros", pero por lo contrario. El damnificado es el ciudadano común que tiene que trasladarse para trabajar, hacer un trámite o ir a un hospital. Pero eso no importa. Porque los ciudadanos comunes son rehenes de las organizaciones sociales, sindicales, políticas y de todo color que pululan en el país y nadie controla.

Cualquier toma la calle y hace un desquicio. Y nadie se anima a frenarlo. El Estado tiene miedo de ejercer su responsabilidad de garantizar el libre tránsito.

Algunos colectivos se desplazarán por la Avenida 9 de Julio, desde Santa Fe hasta San Juan, y otros lo harán por Diagonal Norte y Diagonal Sur, para confluir en La Plaza de Mayo.

"Esta movilización es para manifestar que nos oponemos a que los taxis vacíos circulen por los carriles exclusivos", dijo a Télam Alberto Crespo, presidente de la Cámara Empresaria de Transporte Urbano de Buenos Aires.

"Esos carriles son para agilizar el transporte masivo, y entendemos que la circulación por ellos de taxis vacíos, que se desplazan lentamente, va a entorpecer la marcha entre ellos mismos pero, fundamentalmente, de los colectivos", agregó Crespo.

El empresario dijo que el sindicato, la Unión Tranviarios Automotor, va a participar de esta movilización, y que el objetivo es hablar con las autoridades del Gobierno.

Al respecto, informó que la Cámara ya mantuvo reuniones con el jefe de Gobierno de la ciudad de Buenos Aires, Mauricio Macri, y el jefe de Gabinete, Horacio Rodriguez Larreta, y con funcionarios de la Subsecretaría de Transporte.

Crespo se refirió, además, al Plan Integral de Carriles Exclusivos, elaborado por la Cámara que preside para calles y avenidas, y destacó que "su aplicación significa liberar de colectivos a 35 calles, que quedarán para uso exclusivo de taxis y vehículos particulares".

También argumentó que "cada colectivo puede transportar a 80 personas, y un taxi como máximo a cuatro", al defender su posición.