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Peligra la exportación de gas a la Argentina y Brasil
Opositores al gobierno de Evo Morales decidieron profundizar sus protestas. Una de las medidas podría ser la suspensión del gas y el incremento, casi al doble, de su valor
4 de septiembre de 2008
Prefectos y líderes cívicos de cinco regiones opositoras al gobierno de Evo Morales en Bolivia acordaron ayer profundizar sus protestas y advirtieron que éstas pueden desembocar en la suspensión de la exportación de gas natural a la Argentina y Brasil. También reclamaron que se duplique el precio del producto para esos envíos.
Las autoridades de Santa Cruz, Beni, Pando, Tarija y Chuquisaca, reunidos en la ciudad de Santa Cruz (este), emitieron un comunicado reivindicando sus demandas: el regreso de recursos por alrededor de u$s 166 millones de un impuesto petrolero que el gobierno nacional eliminó desde el 1 de enero, el respeto a sus estatutos autonómicos y el rechazo a la nueva Constitución del oficialismo.
Los opositores advirtieron que "de persistir las acciones del gobierno, no nos responsabilizamos de cualquier acción que impida el suministro de carburantes al exterior del país", en referencia a las exportaciones de gas natural a la Argentina y Brasil, según consigna el diario Ambito Financiero en su edición de hoy.
Los líderes regionales afirmaron que también "se ha decidido masificar el bloqueo de carreteras en los cinco departamentos, en adhesión a las medidas del Chaco", cercano a las fronteras con la Argentina y Paraguay, donde se cumple similar medida desde la semana pasada, impidiendo todo tráfico terrestre a los dos países.
La protesta también incluye la demanda de que Brasil y la Argentina, que adquieren en total entre 32 y 34 millones de metros cúbicos de gas natural por día, paguen al menos el doble del precio que pagan, que oscila hasta ahora entre u$s 7 y 9 dólares el millón de BTU (Unidad Térmica Británica).
Tras el pronunciamiento opositor, la petrolera estatal YPFB indicó que la producción de gas natural es normal pese al bloqueo de caminos que afecta al sureste del país, por lo que las exportaciones a Brasil están garantizadas.
No hubo aparentemente referencia explícita a las ventas a la Argentina, que el martes fueron de 824.000 metros cúbicos, una de las cifras más bajas de los últimos meses, en que los envíos se mantuvieron entre 1,5 y 2 millones de metros cúbicos diarios.
Los campos San Alberto y San Antonio, en el departamento de Tarija, producen 22 de los 30 millones de metros cúbicos de gas que se exporta cada día a Brasil.
El gerente de comercialización de YPFB, Rodrigo Carrasco, dijo que el conflicto social en esa región no perjudicó la producción ni los ductos de transporte, por lo que las exportaciones son normales. San Antonio y San Alberto están en el corazón del Gran Chaco, que comprende las provincias de Santa Cruz, Chuquisaca y Tarija, donde los opositores mantienen bloqueada la región desde hace ocho días.
Ambos campos son operados por Petrobras, que posee 35% de participación, Andina (poco más de 25%), Repsol YPF (25%) y la francesa Total (15%). Tanto los campos de producción como las estaciones de bombeo, de medición y de empalme están bajo protección militar.
Las autoridades de Santa Cruz, Beni, Pando, Tarija y Chuquisaca, reunidos en la ciudad de Santa Cruz (este), emitieron un comunicado reivindicando sus demandas: el regreso de recursos por alrededor de u$s 166 millones de un impuesto petrolero que el gobierno nacional eliminó desde el 1 de enero, el respeto a sus estatutos autonómicos y el rechazo a la nueva Constitución del oficialismo.
Los opositores advirtieron que "de persistir las acciones del gobierno, no nos responsabilizamos de cualquier acción que impida el suministro de carburantes al exterior del país", en referencia a las exportaciones de gas natural a la Argentina y Brasil, según consigna el diario Ambito Financiero en su edición de hoy.
Los líderes regionales afirmaron que también "se ha decidido masificar el bloqueo de carreteras en los cinco departamentos, en adhesión a las medidas del Chaco", cercano a las fronteras con la Argentina y Paraguay, donde se cumple similar medida desde la semana pasada, impidiendo todo tráfico terrestre a los dos países.
La protesta también incluye la demanda de que Brasil y la Argentina, que adquieren en total entre 32 y 34 millones de metros cúbicos de gas natural por día, paguen al menos el doble del precio que pagan, que oscila hasta ahora entre u$s 7 y 9 dólares el millón de BTU (Unidad Térmica Británica).
Tras el pronunciamiento opositor, la petrolera estatal YPFB indicó que la producción de gas natural es normal pese al bloqueo de caminos que afecta al sureste del país, por lo que las exportaciones a Brasil están garantizadas.
No hubo aparentemente referencia explícita a las ventas a la Argentina, que el martes fueron de 824.000 metros cúbicos, una de las cifras más bajas de los últimos meses, en que los envíos se mantuvieron entre 1,5 y 2 millones de metros cúbicos diarios.
Los campos San Alberto y San Antonio, en el departamento de Tarija, producen 22 de los 30 millones de metros cúbicos de gas que se exporta cada día a Brasil.
El gerente de comercialización de YPFB, Rodrigo Carrasco, dijo que el conflicto social en esa región no perjudicó la producción ni los ductos de transporte, por lo que las exportaciones son normales. San Antonio y San Alberto están en el corazón del Gran Chaco, que comprende las provincias de Santa Cruz, Chuquisaca y Tarija, donde los opositores mantienen bloqueada la región desde hace ocho días.
Ambos campos son operados por Petrobras, que posee 35% de participación, Andina (poco más de 25%), Repsol YPF (25%) y la francesa Total (15%). Tanto los campos de producción como las estaciones de bombeo, de medición y de empalme están bajo protección militar.