Las tarifas de electricidad aumentaron entre 10 y 30 por ciento para más de un millón de hogares de clase media y alta -unas cuatro millones de personas--, y 10 por ciento para la industria y el comercio, con retroactividad del primero de julio último.

La medida, adelantada el martes por Noticias Argentinas, alcanzará a los clientes de consumos medios y altos de Edenor, Edesur y Edelap, y busca descomprimir los millonarios subsidios que el Gobierno viene otorgando al sector.

El alumbrado público quedó exento del alza y por ahora no está previsto aumentar tarifas en el caso del gas, aclaró el ministro de Planificación Federal, Julio De Vido, al hacer el anuncio.

La decisión, siempre evitada por el Gobierno por temor a un costo político, se adoptó luego de llegar a la conclusión de que con la política de subsidios se estaba beneficiando a sectores de la sociedad que están en condiciones de afrontar una alza de tarifas que habían quedado muy atrasadas, ya que no se las tocaba desde la salida de la convertibilidad.

Se trata de la primera actualización de tarifas para usuarios residenciales desde 2001, mientras que el último retoque para industrias y comercios había ocurrido en 2006.

De Vido anunció también que se eliminarán los premios, pero no los castigos, para quienes consuman más de 1.000 kilowatts bimestrales, un grupo que representa el 9 por ciento de los clientes residenciales.

El ministro se preocupó en aclarar que el nuevo cuadro tarifario se aplicará sólo para el 24 por ciento de los usuarios residenciales, dado que se comienza a aplicar a partir de consumos superiores a los 650 kilovatios bimestrales.

De acuerdo con lo informado por el funcionario, el 76 por ciento de los hogares consumen por debajo de ese límite, por lo que no registrarán modificación tarifaria alguna.

El aumento promedio en las tarifas de electricidad para el sector industrial y comercial será del 10 por ciento, como reconocimiento al "esfuerzo" que se hizo en el marco del Plan Energía Plus, sostuvo De Vido.

"El aumento es sólo para los que más consumen, tomando en cuenta dos parámetros: redistribución de la riqueza y uso racional de la energía", aseveró el titular de Planificación.

Puntualizó que quedará "sin aumento el 76 por ciento de las familias", dado que el alza se aplicará para "clientes residenciales con consumo mayor a 650 kilovatios por bimestre".

"El incremento de las tarifas será aplicado únicamente al 24 por ciento de los clientes, los de mayor consumo y mayor poder adquisitivo", insistió De Vido, y agregó que "estas medidas apuntan a seguir fomentando el uso racional de la energía".

El nuevo cuadro tarifario implicará cero aumento para quienes consuman hasta 650 kilovatios por bimestre; 10 por ciento para los de entre 651 y 800 kilovatios; 15 por ciento entre 801 y 900; 20 por ciento, entre 901 y 1.000; 25 por ciento, entre 1.001 y
1.200, y 30 por ciento para quienes consuman mas de 1.201 kilovatios bimestrales de electricidad.