Después de cinco horas de incertidumbre y tensión, tres delincuentes que habían intentado asaltar un supermercado chino de la localidad bonaerense de Campana se entregaron a la policía tras arduas negociaciones, y donde mantuvieron como rehenes a más de 20 personas.

El hecho se inició pasadas las 20:00, cuando los delincuentes ingresaron en un local ubicado en Jean Jaures al 1300, cuando fueron descubiertos por un vecino que se dio cuenta de lo que pasaba y llamó de inmediato al 911.

Poco después llegó al lugar un patrullero de la Bonaerense. Y se inició un tiroteo que dejó un policía con una herida de bala en una pierna.

Tras verse rodeados, los delincuentes exigieron la presencia de un juez., mientras el grupo comenzó a negociar con un mediador de la Policía Bonaerense y con el fiscal de Zárate-Campana Alejandro Irigoyen, a quienes le pidieron chalecos antibala, un auto y que se les permita escapar con algunos de los rehenes.

Poco antes de las 23.30, los captores -todos mayores de edad- liberaron a una mujer, a su pequeño hijo y a otro niño, que estaba solo en el local. "Dijeron que estaban jugados y que no les importaba nada. Querían irse y tenían apuntados con las armas a varios niños pequeños", contó la testigo ante las cámaras de la televisión.

El fiscal rechazó el pedido y en cambio ordenó reforzar el cerco sobre la zona. Hasta el lugar llegaron refuerzos de la vecina ciudad de Zárate y también personal del Grupo Halcón.

Luego de casi cinco horas de tensión, ceca de la 1:00 de la madrugada las negociaciones dieron resultado: los asaltantes liberaron ilesos a los más de 20 cautivos y se entregaron a las autoridades.