El ex gobernador Felipe Solá advirtió ayer sobre la falta de un "plan de seguridad" en la Provincia y de "objetivos concretos" para la prevención y represión del delito.

Agotados los tres meses de gracia que suelen otorgar los partidos de la oposición a las flamantes gestiones, sorprendió que Solá -desde el oficialismo- asumiera un cuestionamiento frontal, aun con evidencias de consensos parciales del gobierno de Daniel Scioli en la Legislatura para la aprobación de normas como la reforma penal.

Solá instala una controversia con el gobierno de Scioli en un área sensible a la demanda social. Ayer a la mañana, luego de inaugurar una escuela en Quilmes, Scioli dijo lo suyo, aunque sin nombrar a su antecesor: "A mí no me votaron para que les dé la espalda a los problemas, me gusta ponerles el pecho y la cara a los problemas y estoy para trabajar y solucionar las cosas. La seguridad la vamos a ir mejorando entre todos, así como también la educación pública."

Más tarde, el gobernador se despachó con otra señal: estuvo en la residencia oficial con el diputado nacional y ex candidato a la Gobernación Francisco de Narváez, quien entregó una carpeta con sugerencias para mejorar la seguridad pública. El legislador había aceptado una invitación informal de Scioli a los sectores políticos para un aporte en la materia. Antes se había reunido con intendentes radicales, socialistas y presidentes de los bloques parlamentarios.

El Gobierno bonaerense intenta establecer consensos. La visita de De Narváez estaría en esa dirección, aunque el testimonio de Solá a Radio Mitre provocaría un adelantamiento en los tiempos de la crítica opositora. Ayer, el diputado Jorge Macri -primo del jefe de Gobierno porteño- dijo que el ex gobernador "tiene razón" porque "no hay un plan integral de seguridad".

"A mí me parece que ponen mucho esfuerzo y energía en el tema, sin duda, el ministro (Carlos) Stornelli tiene un bajo perfil, no es un hombre que salga a opinar... Pero creo -agregó el diputado nacional- que hace falta que si el gobernador sale a opinar sobre tantas cosas, también debería hablar en circunstancias complicadas de la inseguridad", aseguró Sola al diario Clarín.

El ex gobernador, que el año pasado vio frustrado su deseo de una reforma constitucional para ser nuevamente reelecto, sostuvo la necesidad de establecer criterios que excedan la voluntad de "decirle a la gente que queremos que estén más seguros, que es un objetivo obvio". Atribuyó, además, la falta de lineamientos generales al "reemplazo de toda la gente (del ex ministro de Seguridad) de León Arslanian".