El presidente de la Cámara de Industria del Comercio de la Carne (CICCRA), Miguel Schiariti, advirtió que las empresas frigoríficas están sometidas a "una especie de persecución" por parte del Gobierno bonaerense, a partir de la ofensiva de controles en las rutas provinciales que puede incluir el decomiso de mercaderías, y advirtió que se quiere hacer cumplir una normativa "ilegítima" sobre el pago de Ingresos Brutos.

"Hay una amenaza concreta de decomiso de mercadería por no cumplir con una normativa provincial, que excede a la normativa nacional. Estamos muy preocupados por la posibilidad de decomiso y por eso advertimos que, de producirse, seguimos analizando la paralización de la distribución en la provincia, para defender el patrimonio de las empresas", señaló.

Schiariti sostuvo que los frigoríficos están "cumpliendo con la normativa nacional pero ahora sentimos una suerte de persecución porque el sector frigorífico se niega a pagar un impuesto ilegítimo como el de Ingreso Brutos a cuya derogación se comprometió el gobierno de la provincia a partir del acuerdo por el cual se le aumentaba la coparticipación a cambio de eliminar ese impuesto para actividades primarias".

"Primero se suspendió la aplicación del impuesto y después se suspendió la suspensión", detalló el directivo en una entrevista con el programa Asteriscos y destacó que esa decisión del gobierno provincial motivó una presentación ante la Corte Suprema bonaerense.

En ese recurso de amparo ante el alto tribunal provincial, la CICCRA advierte que "se pone en peligro el patrimonio de las empresas por no cumplir con una normativa que excede la normativa nacional" y representa una "trampa porque supone que la industria frigorífica debería hacer el trabajo de la dirección de Rentas de a provincia".

El directivo le cargó al propio gobernador Felipe Solá las decisiones sobre estas medidas al afirmar que el subsecretario de Ingreso Públicos, Santiago Montoya, es "sólo un brazo ejecutor, al que le gusta la presencia mediática y que obliga a dar respuesta a una sarta de cosas".

Por ese motivo, CICCRA planteó la posibilidad de suspender la distribución de carne en la provincia de Buenos Aires donde se faenan 6 millones de los 14 millones de cabezas, con el objetivo de "tener certezas de que se respetará nuestro patrimonio"

Por otra parte, Schiariti marcó diferencias con la posición de Confederaciones Rurales Argentinas (CRA) de plantear medidas de fuerza por la política del Gobierno hacia el sector agropecuario. Me da la impresión de que tiene otra motivación que no tiene que ver con los precios", apuntó.