El Banco de la Provincia de Buenos Aires (BAPRO) logró recuperar 103 millones de pesos de su cartera de morosos, a partir del plan de regularización "Borrón y cuenta nueva", lanzado en octubre del 2006.

Las deudas habían sido contraídas mayoritariamente durante la crisis económica de fines de 2001.

Los resultados del programa fueron brindados por el gobernador Felipe Solá y el titular del BAPRO, Marín Lousteau, en conferencia de prensa.

El plan hizo posible que 5.690 pymes y familias se reinserten en el sistema financiero y puedan volver a ser clientes del banco.

"El Banco Provincia ha dejado de ser para el gobierno y los políticos bonaerenses, y pasó a ser un banco de todos", aseguró Solá la hacer el anuncio.

En tanto, Lousteau precisó que la entidad buscó brindar una oportunidad a los clientes con capacidad y voluntad de pago, y reveló que "en sólo seis meses se ha recuperado casi el doble que en cada uno de los años anteriores".

El plan "Borrón y cuenta nueva" benefició a clientes con deudas menores a 500 mil pesos, que al momento de la entrada de la moratoria no contaban con planes de refinanciación.

En la conferencia de prensa también se repasaron los números de la entidad.

Según Lousteau, el BAPRO ya es número uno en créditos personales y el año pasado otorgó 130 mil créditos.

Además, destacó que, en lo que va del año, la cifra de préstamos ya llegó a 50 mil.

En tanto, el gobernador Solá destacó el funcionamiento de los programas "Fuerza Pyme" y "Fuerza Campo".

En el último caso, destacó quye ya se otorgaron 20 millones de pesos.

"Ya no estamos para apuntalar a grandes inversores que pueden encontrar financiamiento en otros lados, pese a que igual tenemos relación con ellos, el objetivo del banco es otro y estoy feliz de que hayamos despegado del crédito político", indicó Solá.