Por Roberto Aguirre Blanco
¿Fin del monopolio de Ibope y más manipulación K?
1 de febrero de 2011
La decisión ya está tomada. Acelerar los tiempos para que la televisión abierta tenga un nuevo rating de audiencia que pueda ser medido en todo el país y en forma "transparente".
El gobierno lo decidió y en con ese fin, acelera los tiempos y en vez de ver la luz en mayo --los tiempos electorales corren-- la idea es licitar en las próximas semanas la compra de 2.000 aparatos de medición remota para que la "nueva consultora" comience a funcionar en abril a más tardar, según pudo saber Asteriscos.Tv.
La idea es que el nuevo ente pueda ser auditado por cualquier otra empresa y mida no solo la ciudad de Buenos Aires y el conurbano, sino que amplíe el universo a todo el país.
Ibope ha tenido en estos años, más allá de estar homonologado y en perfectas condiciones legales de operar, cuestionada, desde algunos sectores privados como una fuente única de medición y a veces con algunas dudas sobre la claridad en su sistema.
También fue el centro desde el sector público donde se cuestionó el poco universo poblacional que abarca y de cierta "preferencia a los canales líderes" en desmedro de programaciones oficiales.
Y en este punto se abre desde ya un manto de duda. Según se escucha en pasillos oficiales, a la convocatoria de licitación se podría formar una entidad de estadísticas con fuerte intervención de voces del gobierno.
Si esto se materializara y además fueran los ganadores de este llamado se podría estar frente a un escenario muy similar a las dudas y fuertes cuestionamiento que genera el INDEC con sus datos mensuales sobre la economía nacional.
Bien se sabe de la importancia que siempre el ex presidente Néstor Kirchner le dio a los medios de comunicación, como objeto de crítica o enemigos públicos, o como medio de difusión de las ideas del modelo que representa el gobierno nacional.
Al uso "militante" de la agencia oficial Télam, ya sin tapujos, la tribuna partidaria y de una sola voz de la Televisión Pública y Radio Nacional, se puede sumar este último punto de discusión sobre los programas que mas se ven o que canal domina la audiencia.
La prueba del "Fútbol para Todos", trofeo de batalla del oficialismo para acercar este espectáculo gratuito a todos los argentinos y a la vez negar cualquier tipo de financiamiento externo a la publicidad oficial, en un hecho adrede, sigue sirviendo como dato relevante de lo que se quiere modificar.
Cuando canal 7 transmite los encuentros futbolísticos el promedio de los equipos grandes, especialmente los domingos, alcanza los dos dígitos (entre 12 y 16 puntos) marcas nunca soñadas por la TV estatal.
Sin embargo, apenas terminan la emisiones futboleras el rating baja irremediablemente al piso habitual de 2 ó 3 puntos y justo con el programa insignia del gobierno "6,7,8".
Desde el gobierno se pretendería cambiar ese paradigma y comenzar un trabajo muy "sutil" de manipulación de datos, similar al que ocurre en el INDEK actualmente, donde la inflación anual de 2010 alcanzó 10,9 contra un piso de 25 de fuentes privadas.
Lo más probable es que las mediciones que ofrezca el ente que conforme el Gobierno sean bastante diferentes a las privadas, y finalmente emisiones como “678”, “Bajada de línea”, “Duro de domar” o “Televisión registrada” consigan el rating que desean.
Con bigote o sin él, está claro que Gabriel Mariotto, titular de la Autoridad Federal de Servicios de Comunicación Audiovisual, impulsor de esta idea, intentará mimetizarse con Guillermo Moreno.