Por Roberto Aguirre Blanco
En el país de la división, algunos son inteligentes
11 de agosto de 2010
La televisión tiene esos vaivenes impredesibles que deja a los fundamentalistas siempre mal parados, y a la vez, si querer trasluce un concepto de integración más allá de las ideas absolutas.
¿De qué se va a disfrazar ahora "6,7,8", "TV Registrada" y "Duro Domar", tres programas convertidos en espacio político del oficialismo en la televisión, donde todo aquel personaje de la vida argentina política o de medios que no piensa como "debería pensar" es defenestrado hasta el hartazgo?
Nadie pretende criticar la defensa de las ideas, solo que cuando se critica la manera de comunicar de algunos medios tildados de opositores y desde la otra vereda, se hace exactamente los mismo desde el concepto de "idea única" sin nadie con quien debatir un mirada diferente y de pluralismo, algo no funciona bien.
Se apela a la "inteligencia" del espectador y lo que realmente se hace es manejar a este protagonista clave de la recepción de la información y tildarlo de "estúpido" que tiene que estar de un lado u de otro de este enfrentamiento.
¿No sería mejor dejar elegir lo mejor de un lado y de otro, formar una propia idea con mas amplitud y que a la hora de decidir que lado lo representa más ubicarse con la seguridad que de vez es sano también pensar distinto?
¿A que viene todo esto? Simple, en la segunda temporada del "Fútbol para todos" este botín político que es el deporte más popular emitido por la televisión pública a todo el país se abrió el juego del libro de pases pero con características muy particulares.
En algunos casos, si se habla bien del "negocio" del gobierno el pasado no importa y reina la desmemoria, pero ahora por necesidad o por conveniencia o quizás también para sumar calidad de voces identificadas al fútbol, la producción abre las puertas a "periodistas de la vereda de enfrente".
En la primera fecha debutó en el partido central Marcelo Benedetto y a partir de la segunda lo hará "Tití" Fernández, hombres de prensa totalmente identificados con TyC Sports, "enemigo número uno del pueblo argentino", según algunos de estos programas mencionados.
Ambos con contratos vigentes con la productora deportiva aceptaron las "invitaciones" de Canal 7 y los fines de semana estarán en el "Fútbol para Todos" mientras de lunes a viernes continuarán con sus programa en FOX Sports y los partido de copas sudamericanas, ambas producciones de TyC.
"Somos laburantes" dijo Fernández al justificar porque deciden aceptar la propuesta del 7 , pero a la vez aclararon que no está en sus planes renunciar a la señales pagas y que estos dieron el visto bueno para su incorporación a la competencia.
Aquí no se mueven niveles de posturas ideológicas, ni actitudes "políticamente correctas" solo se hace el uso de la opción de un trabajador de elegir donde y como ejercer con dignidad su oficio.
La pregunta es: ¿qué harán ahora los programas oficialistas antes mencionados que se dedicaron a mofarse y mostrar en actitudes supuestamente contradictorias y anti populares tanto de Tití como Benedetto?.
¿De que sirvieron tantas horas de edición, imágenes, informes y palabras de periodistas con el dedo acusador de lo "bueno y lo malo" si ahora estos muchachos están en la misma vereda y en realidad tienen la sana costumbre de tener los pies en ambas aceras de la calle?.
Muchachos a relajarse, la idea es que cada uno piense como piense la profesionalidad nada tiene que ver con las elecciones políticas, sino con el compromiso a hacer cada día mejor su trabajo.
¿Esto se entenderá o será tan "duro" que hay que explicarlo 6,7,8 veces hasta que quede registrado?