El próximo lunes 24, a las 10, el intendente de San Isidro, Gustavo Posse, dejará habilitada en el Hospital Central de San Isidro –Av. Santa Fe 431- la flamante Unidad de Contención y Tratamiento para Pacientes expuestos a Agentes Biológicos Transmisibles.
Los recientes brotes de enfermedades transmisibles han alertado al sistema de salud sobre la necesidad de implementar acciones para optimizar el manejo clínico de enfermedades infecciosas poco comunes o aun desconocidas. Un número creciente de consultas de pacientes que regresan del exterior del país, la introducción de vectores transmisores en áreas metropolitanas a consecuencia del cambio climático global y la evolución natural de los agentes biológicos son alguna de las causas que aumentan las probabilidades de enfrentar enfermedades trasmisibles de alto potencial patógeno.
Bajo estas circunstancias, desde el Hospital Central de San Isidro se ha reconocido la necesidad de crear un área para la atención y contención de pacientes expuestos a agentes biológicos de alta transmisibilidad y/o patogenicidad que consultan o son referidos al Hospital.
La Unidad es única en su género en la Provincia de Buenos Aires, y presenta las características adecuadas para brindar una óptima atención médica a las personas afectadas, proteger a la comunidad, evitar la transmisión intrahospitalaria a otros pacientes y minimizar el riesgo del personal de salud.
Está emplazada en un área de la Guardia del Hospital, donde se ha incorporado la tecnología necesaria para cumplir con criterios de funcionamiento y seguridad internacionalmente aceptados.
El ingreso y egreso de la Unidad se realiza por puertas independientes. Las salas de internación en número de 3, pueden alojar hasta 7 camas y tienen capacidad para la contención y tratamiento de pacientes afectados por patógenos transmisibles a través del aire ambiental, artrópodos vectores, sangre y fluidos biológicos.
Su diseño tiene la flexibilidad suficiente para ser adaptado a la demanda de potenciales enfermedades que podrían requerir la implementación de procedimientos de máxima seguridad o alta complejidad. La unidad cuenta con una sala de examen independiente de las salas de internación para facilitar la evaluación médica de personas asintomáticas expuestas y sus contactos respectivos.
Una pieza clave en la tecnología incorporada es el sistema de ventilación controlado e independiente del utilizado en el resto del Hospital. Todas las habitaciones disponen de un sistema que mantiene una diferencia de presión de 2.5 Pa con respecto al exterior. Dentro de las habitaciones de la flamante Unidad, el recambio de aire es de 12 veces por hora para asegurar la rápida “dilución” de agentes biológicos que permanecen en suspensión.
Para evitar la contaminación exterior desde la Unidad, la totalidad del aire es activamente eliminado a un espacio abierto. Adicionalmente, el 100% del aire ventilado al exterior atraviesa filtros de alta eficiencia (HEPA: del ingles “High Efficiently Particulate Air”) destinados a la contención de agentes biológicos y tóxicos. El funcionamiento del sistema es optimizado por el cierre alternante de puertas que impide la apertura simultánea de puertas internas y/o externas mientras la habitación que aloja un paciente permanezca abierta.
Un aspecto fundamental en el funcionamiento de la Unidad es el entrenamiento de la planta profesional encargada de la atención de los pacientes. El personal a cargo de la Unidad es especialista en Enfermedades Infecciosas y profesionales de otras especialidades médicas, quirúrgicas y de laboratorio.
El personal de enfermería es clave en la ejecución y supervisión de los procedimientos de cuidado y tratamiento de los pacientes y mantenimiento de la unidad. Un programa de entrenamiento e intercambio permanente con expertos nacionales e internacionales mantendrán un nivel de excelencia en este nuevo servicio que se incorpora a nuestro sistema de salud.