En la actualidad existen muchos mitos sobre la artrosis. Cada vez en el mundo se conoce más sobre la artrosis y como tratarlas, desde fármacos específicos, alimentación y tratamientos regenerativos para el cartílago.
En la actualidad existen muchos mitos sobre la artrosis. Cada vez en el mundo se conoce más sobre la artrosis y como tratarlas, desde fármacos específicos, alimentación y tratamientos regenerativos para el cartílago.
Por tal motivo, Gonzalo Yamauchi Quintian, especialista en Medicina Familiar y Medicina Musculoesquelética, miembro fundador de LAOM (Asociación Latinoamericana de medicina musculoesquelética) y médico de familia del Hospital Italiano de Buenos Aires difundió mitos y realidades de la Artrosis.
Artrosis es diferente de artritis
La artritis es una enfermedad autoinmune (donde el cuerpo reacciona o destruye sus propias células) creando afectación en distintas articulaciones y en distintos órganos. Es habitual que la artritis vaya acompañada con enrojecimiento y edema (hinchazón) de la articulación. La artrosis es una enfermedad degenerativa que significa que la articulación se va dañando por el paso del tiempo, por el desgaste del cartílago articular. La artrosis es una enfermedad por fricción de las dos articulaciones nunca va acompañado de enrojecimiento de la articulación.
Artrosis generalizada
Muchas personas refieren tener artrosis generalizada, el término es incorrecto ya que como es una enfermedad por desgaste de cada articulación no afecta a todas las articulaciones del cuerpo. Existen personas que tienen mayor facilidad para padecer artrosis en varias articulaciones, pero cada articulación se afecta individualmente y no en conjunto.
La artrosis tiene un componente hereditario importante, o sea si un familiar directo padece de artrosis uno tiene mayor predisposición a tener artrosis en los mismos lugares, sin embargo, si el paciente finalmente padece artrosis depende más de los factores adquiridos como si es obeso, si realiza ejercicios, si realiza una dieta adecuada; que los factores hereditarios.
Artrosis y vida saludable
Los hábitos de vida saludables como la alimentación de frutas y verduras, especialmente la palta y soja como así los cítricos para ingerir mayor cantidad de vitamina C hacen que las personas tengan menor predisposición a sufrir de artrosis. Los ejercicios físicos aeróbicos favorecen a que la artrosis se desarrolle más lento porque al tener mayor desarrollo muscular predispone a que se dañe y se desgaste menos la articulación. Por otro lado, aquellos ejercicios que sean de impacto como correr y trotar sin una preparación adecuada como el calzado y elongación muscular, predispone en forma negativa a la articulación.
Artrosis y humedad
Muchas personas refieren que con la humedad y el mal tiempo los dolores son más agudos. En la actualidad no hay un trabajo de investigación científico que avale este mito, sin embargo, se sabe que la presión barométrica o atmosférica afecta los tendones, ligamentos y articulaciones llevando a que la gran mayoría de los pacientes pueda percibir más dolor en dichas situaciones. La experiencia con pacientes con artrosis asevera que las personas que padecen artrosis pueden notar los cambios en la presión atmosférica.
Artrosis es solo quirúrgica no tiene otros tratamientos
En la actualidad, existen varias técnicas para evitar las cirugías en las artrosis, se los conoce como técnicas regenerativas que hacen que la artrosis retroceda pudiendo llevar al paciente a la curación o a grados menores de afectación.
En el mundo se están utilizando tratamientos que apunten a regenerar el cartílago y que ese cartílago sea de buena calidad (buena calidad de colágeno), así como dar fuerza a la cápsula articular. Existen 3 tratamientos con estos objetivos:
La Proloterapia o inyecciones con dextrosa, es una técnica donde se utiliza dextrosa (un azúcar) a alta concentración como irritante, este produce inflamación lo que lleva a la producción de nuevos vasos sanguíneos alrededor de la articulación, atrayendo factores de crecimiento y de regeneración a la articulación dañada y genera una cascada de reparación de la articulación. Los tratamientos con dextrosa son una vez por mes y suelen requerirse de 4 a 6 tratamientos para que el paciente mejore por lo menos un 80%.
La segunda línea regenerativa es el Plasma Rico en Plaquetas (PRP), se inyecta directamente factores de crecimiento y regeneración dentro de la articulación. Los factores de crecimiento y las sustancias que estimulan la reparación y regeneración de los tejidos se encuentran en la pared de las plaquetas. El PRP consiste en la centrifugación de la sangre del paciente para extraer las plaquetas para luego romperlas y liberar estos factores regenerativos. Los tratamientos con plasma suelen ser cada 4 a 6 semanas y se requieren entre 2 y 4 para la mejoría del paciente. Si bien la efectividad real del plasma todavía no se encuentra dilucidada en los trabajos de investigación se estima que es del 70 al 90%
La técnica más moderna en el mundo en cuanto a tratamientos regenerativos para la artrosis son las células madres. Es posible obtenerlas de dos lugares, uno es de la grasa habitualmente abdominal y la otra es la médula ósea que se extrae bajo punción de la cresta iliaca. La ventaja de las células madres es que se inyectan células que se convierten en aquellas que están dañadas reemplazándolas en su función, por ejemplo, para la artrosis se inyectan células madres para que se conviertan en condrocitos (células propias de la articulación) reemplazando a las dañadas. Esto lleva a la regeneración y reparación de la articulación. En Estados Unidos se utilizan células madres hace ya más de 10 años con grandes resultados. Se las suele inyectar asociada a plasma rico en plaquetas y se realizan 1 o dos inyecciones anuales, se recomienda más que nada para articulaciones grandes como rodilla y cadera. En la actualidad las células madres no se pueden realizar en Argentina ya que la legislación no permite su uso, solo permite para fines de investigación.