Profesionales del Centro Hirsch desarrollaron el “Proyecto Anfitriones” con adultos mayores de la institución. El objetivo es que volvieran a sentirse “protagonistas” en su entorno realizando actividades que habían perdido con la institucionalización, como recibir invitados e ir de compras, lo que representa un verdadero cambio de paradigma a nivel de instituciones geriátricas.

“Anfitriones” está en marcha desde enero de 2016. “Más allá de los números, que son meras estadísticas, el impacto más notable se pudo observar en los rostros, actitudes y expresiones de los participantes antes y después de la experiencia. Se los ve felices y con ganas de hacer más encuentros siendo ellos los protagonistas. Muchos residentes muestran interés en participar del proyecto”, afirmó el Dr. Moisés Schapira MN Nº72224, Director Médico del Centro Hirsch.

Para cuantificar el impacto, se eligieron residentes con baja autoestima, según la escala de Rosenberg que evalúa entre otras cosas cuán satisfecha está consigo misma, cuán útil se siente o si tiene una actitud positiva frente a la vida, entre otros ítems.

Lo llamativo es que una vez concluido el proyecto, los participantes mostraron una elevación en los índices de autoestima: se evidenció un impacto positivo, obteniendo una media de 26,6 (23-29) al inicio, y una media de 30,6 (28-35) al final de la misma.

Para ejemplificarlo, un caso es por demás elocuente: A.H. es una señora (que en su estadía de 4 años en la institución nunca había festejado su cumpleaños, hasta pasar por la experiencia de ser anfitriona. Motivada, decidió realizar una “merienda autobiográfica” en la cual se presentó ante sus invitados, a quienes conocía solo de vista. En el encuentro comenzó contando quién era, qué le gustaba y otras cosas personales (historia de vida). Con un efecto contagio llamativo, el resto hizo lo mismo mientras se escuchaban atentamente entre sí. Al día siguiente, AH empezó ( a establecer vínculos con sus pares) mostrar interés de hacerse amigos y a charlar con otros residentes.

Un cambio de paradigma

“La palabra hogar viene de hoguera, que simboliza la calidez que se supone hay en cada casa particular. En el imaginario popular, las instituciones son lugares fríos, lúgubres y despersonalizados. Por esta razón, este proyecto es un cambio de paradigma que busca poner al individuo en primer plano y resignifcar su rol de protagonista en su entorno” explica el Dr. Juan Hitzig, médico (MN 38547) especialista en Psico-biología del Estrés y Envejecimiento y ex director médico del Centro Hirsch.

“El programa consiste en que el participante reciba gente de su entorno como anfitrión, y el objetivo es ayudar a las personas que se encuentran atravesando por la dificultad de sostener vínculos, a entablar relaciones con sus pares dentro de la institución. Trabajamos para estimular y potencializar habilidades cognitivas, sociales y funcionales" , explican Cristyn González MN 2523 Terapista Ocupacional y Gabriela Puerta MP 9681 Trabajadora Social, ambas del Centro Hirsch e impulsoras de “Anfitriones”.

Todo está planificado por el individuo que piensa cómo será el encuentro, cuál será la dinámica del mismo, cómo será la ambientación, que se comerá ese día, quienes serán los invitados y qué recursos se necesitarán para que esto se lleve a cabo. Ellos piensan diferentes actividades, como por ejemplo, un almuerzo reminiscente, cuyo objetivo es evocar a través de sabores, condimentos, aromas, comidas, etc, recuerdos de años anteriores.

La idea es que los anfitriones retomen ese rol significativo, que debido a la institucionalización se desdibuja. Pero también puede ser una actividad que nunca antes habían desarrollado y que ahora encuentran placer al realizarla. De eso se trata el envejecimiento activo, sostener tareas placenteras para la persona, si no las puede realizar como lo hacía antes, adaptarlas o bien brindarle un nuevo abanico de intereses. La reminiscencia los conecta con etapas, elementos, emociones, roles e intereses que fueron importantes en su vida, por eso el diseño del proyecto engloba actividades significativas para la persona implicada.

Un proyecto premiado

Los resultados fueron sorprendentes y exitosos no solo “puertas adentro”, sino que además fue uno de los cuatro proyectos para mejorar la calidad de vida, optimizar las oportunidades y promover el desarrollo integral de las personas adultas mayores que fue premiado en el Forum Gerontológico "Iniciativas Amigables Para Personas Mayores y Participación Social" realizado por primera vez en nuestro país.

La actividad fue organizada por el Centro Internacional de Longevidad (ILC) en Argentina, la Sociedad Argentina de Gerontología y Geriatría (SAGG) y la Escuela de Ciencias del Envejecimiento de la Universidad Maimónides.