Con el correr de los meses, y ya lejos de los efectos del verano y del descanso, y las ojeras se encuentran nuevamente en el ranking de las preocupaciones en hombres y mujeres.
Con el correr de los meses, y ya lejos de los efectos del verano y del descanso, y las ojeras se encuentran nuevamente en el ranking de las preocupaciones en hombres y mujeres.
Pero no siempre sabemos qué las producen ni qué podemos hacer para disimularlas o qué tratamientos existen para disminuirlas.
Por eso, la dermatóloga Mariela Nazar, especializada en dermatología estética explicó qué son las ojeras, qué son y cómo tratarlas.
En ese sentido, Nazar detalló que "la mirada es capaz de transmitir un sinfín de sentimientos, pero cuando las ojeras aparecen -mismo sin quererlo- nuestra expresión cambia y todo el rostro refleja cansancio".
"Es por eso que las mujeres buscamos constantemente soluciones cosméticas y/o estéticas para controlar esos molestos círculos oscuros que aparecen alrededor de los ojos, y de los cuales generalmente no conocemos el origen. Si bien se las suele asociar a la falta de sueño, hay varios factores desencadenantes que no tienen relación alguna con el descanso. La Doctora Mariela Nazar, dermatóloga, nos explica ¿qué son las ojeras?, ¿porqué se forman? y como podemos combatirlas", dijo.
¿Qué son las ojeras?
Se llama ojera o hipercromía idiopática del anillo orbitario, a la alteración del color de la piel de los párpados, debido a una excesiva producción de melanina y/o a la dilatación de los capilares próximos a la superficie de la piel. Estas alteraciones suelen seguir la anatomía del músculo orbicular de los ojos dando como resultado, un aspecto de rostro cansado o enfermo. Es importante saber que la piel que rodea los ojos es 4 veces más fina y delicada que la del resto del cuerpo y como consecuencia, es más fácil que se manifiesten, arrugas, deshidratación, flacidez y edemas.
¿Qué las causan?, ¿son hereditarias?
Hay tres factores que caracterizan a las ojeras: mayor vascularización, mayor depósito de pigmento y una ligera depresión que colabora a que se vea más sombra debajo del ojo en el párpado inferior. Esa depresión, también llamada surco de ojeras, o valle de lágrimas, es un surco bien definido que se forma por la falta de tejidos blandos en la zona del contorno del ojo, quedando la piel del párpado directamente en contacto con las estructuras óseas subyacentes, en este caso, el marco de la órbita. Si bien muchas veces la aparición del surco de ojeras esta relacionada al envejecimiento, también puede estar ligada a una causa constitucional o congénita familiar, es decir, que genéticamente estemos marcados a reabsorber más, o menos tejido blando y masa ósea, independientemente de la edad que tengamos.
Hoy podemos decir que la causa más común es hereditaria, hay una predisposición familiar a tener ojeras y estas suelen presentarse desde la infancia.
¿Quiénes tienen mayor predisposición a tener ojeras?
Tienen mayor predisposición a desarrollar o a empeorar las ojeras existentes, aquellos pacientes con alergias respiratorias, con procesos irritativos crónicos de la piel de los párpados, cambios hormonales como los que suceden durante la menstruación o el embarazo, así como también, los pacientes con enfermedades crónicas tiroideas, renales o infecciosas.
Las ojeras, también tienen relación directa con las distintas razas, ya que la pigmentación de la piel, varía según las mismas. La mediterránea tiende a generar mayor pigmentación que otras razas de piel más clara y el exceso de pigmentos en esa área provoca un cambio de coloración importante. De acuerdo al color de la piel, las ojeras adquieren diferentes tonalidades, en la piel oscura se ven marrones y en las pieles claras violáceas.
Falta de descanso, stress, excesos, uso continuo de dispositivos electrónicos, etc. ¿Estos factores empeoran o pueden producir ojeras temporales?
Dormir poco hace que los vasos capilares de los parpados se dilaten otorgando a la piel un color morado. La alimentación también puede influir, comer alimentos muy salados produce mayor retención de líquidos y mayor congestión en los párpados.
Con respecto al uso continuo de dispositivos electrónicos, no hay estudios que demuestren que tengan incidencia en la exacerbación de las ojeras.
¿Qué solución existe?
En primer lugar, es importante tener en cuenta que, dormir bien (8 horas), beber por lo menos 2 litros de agua al día y consumir la menor cantidad posible de sal y alcohol, son hábitos saludables que van a colaborar en la disminución de las ojeras.
Si bien existen soluciones cosméticas para atenuarlas, también se puede disminuir la pigmentación y la vascularización en forma temporaria, con la combinación de tratamientos con cremas despigmentantes, descongestivas y fuentes de luz como Luz Pulsada Intensa y el Láser.
Para mejorar la depresión a nivel del surco del canal lagrimal, que aumenta la sombra y marca más las bolsas, el laboratorio Allergan desarrolló un producto de relleno elaborado con una nueva tecnología llamada Vycross que combina moléculas de Ácido Hialurónico de bajo y alto peso molecular, dando como resultado un gel uniforme de larga duración, alta precisión y especifico para la región periocular, que permite con gran seguridad devolver ese volumen perdido.
Para mejorar la depresión a nivel del surco del canal lagrimal, que aumenta la sombra y marca más las bolsas, se utiliza el implante de Ácido Hialurónico en su nueva presentación. Es un gel uniforme de larga duración, alta precisión y especifico para la región periocular, que permite con gran seguridad devolver ese volumen perdido. Este nuevo producto tiene una textura muy suave al tacto que se acomoda delicadamente en la piel, lo que garantiza un rápido regreso a las actividades normales. La colocación de este producto se realiza con microcánulas y además posee un anestésico en su formulación (lidocaína), garantizando el confort de los pacientes. Al devolver el volumen perdido, se consigue disminuir la sombra en la ojera y reducir las bolsas lo que devuelve a la mirada, un aspecto descansado, juvenil y fresco”.
Este nuevo producto tiene una textura muy suave al tacto que se acomoda delicadamente en la piel, ayudando a minimizar el edema post tratamiento, lo que garantiza un rápido regreso a las actividades normales. Además, posee un anestésico en su formulación (lidocaína), lo que nos permite trabajar con mayor precisión y seguridad, garantizando el confort de nuestros pacientes, durante y post aplicación.
Al devolver el volumen perdido, se consigue disminuir la sombra en la ojera y reducir las bolsas lo que devuelve a la mirada, un aspecto descansado, juvenil y fresco.
Siempre que estemos por realizar un tratamiento estético mínimamente invasivo, es fundamental elegir cirujanos plásticos, dermatólogos o médicos especialistas entrenados en la técnica de aplicación, y el mismo debe llevarse a cabo exclusivamente en centros de salud o consultorios habilitados; del mismo modo, debemos exigir al profesional que nos muestre el producto antes de ser aplicado.