La presbiacusia, relacionada con el proceso de envejecimiento, es la pérdida gradual de la audición, y sus primeros síntomas pueden comenzar a partir de los 40 años. Al principio, la persona afectada no se da cuenta de su situación, pero con el correr de los años, las capacidades comienzan a comprometerse de forma más notoria.
Según Mónica Matti, fonoaudióloga y Responsable del Área de Formación y Calidad de GAES Centros Auditivos, entre los síntomas más frecuentes se encuentran:
- Lo que otros dicen se percibe como un murmullo
- Complicaciones en la comprensión de las conversaciones
- Ciertos sonidos pueden llegar a resultar fuertes
- Puede haber presencia de zumbidos sin motivo aparente (tinnitus)
- Facilidad de percepción de voces masculinas (graves) antes que femeninas (agudas)
La presbiacusia está vinculada al envejecimiento, sin embargo, hay otros factores que pueden contribuir a que se desarrolle esta condición: predisposición genética, acumulación de exposición a ruidos ambientales e intensos, estado general de salud de la persona y cuidados aplicados a su estilo de vida.
La importancia de la prevención
Según datos del Estudio sobre Audición de la Población Argentina, más del 61% de la población argentina no tiene el hábito de realizarse controles de audición, así como también más del 41% de los encuestados de más de 50 años reconocieron que les ha empeorado su audición con la edad.
Esta patología puede llegar a afectar psicológicamente a la persona que la padece, ya que muchas veces la falta de comprensión del medio que lo rodea lo puede llevar al aislamiento y a sufrir depresión, generando una sensación generalizada de inseguridad y/o baja autoestima.