Entre un 10 a 15 % de las parejas consultan por infertilidad:
-1/3 secundario se debe a causas femeninas
- 1/3 se debe a causas masculinas.
-1/3 se debe a causas desconocidas.
El varicocele es una patología frecuente que compromete al 15 % de la población general, al 35% de los pacientes que presentan infertilidad primaria y al 75 - 80 % de aquellos que presentan infertilidad secundaria. Se trata de la dilatación patológica de venas del cordón espermático, que puede desarrollarse en forma unilateral o bilateral.
Debido a la deficiencia circulatoria generada por la presencia del varicocele, la sangre circulante aumenta la temperatura escrotal y a su vez la de los testículos, este aumento de temperatura podría ser una de las causa de la alteración de la espermatogénesis.
Si bien la mayor parte de los hombres que padece varicocele no presenta síntoma alguno y es detectado en un examen físico de rutina, la consulta médica es fundamental si se muestra alguno de los siguientes síntomas:
- Dolor testicular
- Pesadez testicular
- Infertilidad
- Atrofia testicular
- Vena testicular palpable o visible
Sin embargo, la consulta más frecuente es por tres causas: la primera es alteración del espermograma, la segunda es por dolor y la tercera por estética, en aquellos pacientes portadores de varicoceles severos y visibles de gran tamaño.
Aquellos pacientes con un espermograma normal, un volumen testicular normal y asintomático, podrán controlarse cada 6 a 12 meses.
¿Cómo se lleva a cabo la varicocelectomía?
Existen diferentes técnicas quirúrgicas para su resolución, dentro de estas existe la varicocelectomía microquirúrgica.
Esta técnica presenta las siguientes ventajas:
1)es una técnica ambulatoria.
2)no tiene necesidad de incidir músculos de la pared abdominal por consiguiente la recuperación es mas rápida y menos dolorosa.
3)puede efectuarse con anestesia local o neuroleptoanestesia.
4)preserva la arteria espermática, manteniendo el aporte sanguíneo del testículo por medio de sus tres arterias nutricias.
5)Permite la visualización de conductos linfáticos lo que favorece un buen drenaje de la linfa evitando posibles hidroceles.
En esta técnica, la incisión de aproximadamente 3 cm en la piel se lleva a cabo sobre el orificio inguinal superficial, luego se exterioriza al cordón espermático, se observa si presenta venas extrafuniculares que pueden ser causas de recidiva. La cirugía se realiza bajo visión microscópica lo que permite un mayor visión de los elementos del cordón espermático, así se puede preservar la arteria espermática, y luego se procede a la disección de venas varicosas para su ligadura y sección.
El procedimiento se realiza en forma ambulatoria y es mínimamente invasivo permitiendo una más rápida recuperación. Las complicaciones más comunes posteriores a la varicocelectomía son: hidrocele, recurrencia del varicocele e injuria arterial.
El uso del microscopio favorece la identificación de la arteria espermática, de los linfáticos y de las venas espermáticas, reduciendo significativamente las posibilidades de las complicaciones antes mencionadas. Por lo tanto, y no sólo ante la presencia de algún síntoma, siempre es importante llevar a cabo una consulta con el especialista que corresponda.