Las personas que padecen Fibrilación Auricular tienen 5 veces más posibilidades de sufrir un accidente cerebrovascular. El 29 de octubre se conmemora el Día Mundial de esta dolencia que puede matar
La fibrilación auricular (FA) es el tipo de arritmia cardíaca sostenida más frecuente. Su prevalencia varía según la edad, desde aproximadamente un 1% en la población general, hasta casi un 9% en personas cercanas a los 80 años. Esta arritmia aumenta considerablemente el riesgo de padecer un accidente cerebrovascular (ACV) y es por esto que el tratamiento preventivo es crucial.
Las personas con fibrilación auricular tienen un riesgo mayor de desarrollar trombos dentro del corazón; si se desprende un parte del mismo, éste puede desencadenar un ACV.
Por esto, padecer FA incrementa el riesgo de presentar un ACV. Los ACVs relacionados con FA tienden a ser más graves que los relacionados con otras afecciones: presentando una mortalidad del 20% al mes e incapacidad en el 60% de los casos.
Al conmemorarse el próximo martes 29 de octubre el día mundial del ACV, se estima que alrededor del 50% de las personas que sufren un accidente cerebrovascular relacionado con la FA mueren al cabo de 1 año. Entre los sobrevivientes del ACV la recurrencia del mismo es más frecuente, con la posibilidad de que el daño al cerebro sea más grave, según información suministrada por el laboratorio Boehringer Ingelheim.
¿Cuáles son los síntomas de la fibrilación auricular?
Muchos pacientes con FA pueden no tener síntomas y no son conscientes de su afección.
Los síntomas que pueden experimentar son:
* Palpitaciones
* Fatiga /debilidad
* Mareos / desmayos
* Dificultad para respirar
* Angina (dolor en el pecho)
Prevención de los accidentes cerebrovasculares relacionados a FA
• Dos de cada tres ACVs debidos a la FA pueden prevenirse mediante un tratamiento adecuado con antagonistas de la vitamina K (AVK).
• Las limitaciones del tratamiento con AVK dan por resultado que un número significativo de pacientes con diagnóstico de FA queden expuestos al ACV ya sea por encontrarse sin tratamiento
antitrombótico apropiado a su riesgo individual o por no tener el control adecuado de la anticoagulación que estos fármacos habitualmente requieren.
• Existe la necesidad de contar con nuevos anticoagulantes orales, eficaces y seguros, sin las limitaciones de los AVK.
2 de cada 3 ACVs causados por Fibrilación Auricular pueden ser
prevenidos con una terapia antitrombótica apropiada.
¿Cuál es la terapia apropiada para la FA?
Para el tratamiento de la FA es necesario el control del ritmo cardíaco o control de la frecuencia cardíaca y prevenir las complicaciones embólicas con un tratamiento antitrombótico apropiado.
En los estudios clínicos, la terapia anticoagulante efectiva con fármacos llamados Antagonistas de la Vitamina K (AVK) como el acenocumarol o la warfarina, han demostrado reducir significativamente el riesgo de ocurrencia de ACV en un 67% y en un 25% la mortalidad asociada.
Al indicar un tratamiento antitrombótico, se debe optimizar el balance entre el riesgo embólico y el potencial riesgo de presentar hemorragias y para esto es importante que al utilizar AVK se encuentren en un rango de anticoagulación adecuado, medido mediante una prueba de laboratorio conocida como RIN (Razón Internacional Normatizada).
Los fármacos AVK presentan múltiples interacciones con fármacos y alimentos, lo cual sumado al requerimiento de monitoreos sanguíneos frecuentes, muchas veces termina limitando su uso en la
práctica cotidiana.
Es por esto que en la última década se desarrollaron nuevas alternativas terapéuticas, con la finalidad de optimizar la anticoagulación de los pacientes. Existe una nueva clase de
anticoagulantes orales que han evidenciado en los estudios clínicos de prevención del ACV relacionado a FA una eficacia superior o similar al tratamiento convencional (en función de la dosis utilizada) con similar perfil de seguridad, sumando el beneficio de no requerir monitoreos de la coagulación ni presentar interacción con los alimentos.
El accidente cerebrovascular es una enfermedad vascular que afecta a las arterias del cerebro o que llegan al cerebro. Un
accidente cerebrovascular sucede cuando el flujo de sangre llega a alguna parte del cerebro y este se detiene.
A consecuencia de este bloqueo en la circulación de sangre, parte del cerebro no recibe flujo; se priva de oxígeno y las células cerebrales afectadas no pueden funcionar y mueren en minutos a
causa de la Hipoxia. Cuando estas células mueren, la parte del cuerpo controlada por ellas dejan de funcionar. Los efectos devastadores del ACV son generalmente permanentes porque mueren
las células cerebrales las cuales no pueden ser reemplazadas por otras.
Según la OMS anualmente en el mundo, se producen 15 millones de Accidentes Cerebrovasculares (ACVs), constituyéndose en la primera causa de discapacidad a nivel mundial16. En nuestro país, no sólo es la primera causa de discapacidad permanente en adultos, si no que provoca unas 14.000 muertes al año, según estimaciones del Ministerio de Salud de la Nación.
Afecta más a hombres que a mujeres y la máxima frecuencia en Argentina se da entre los 65 y 70 años. Sin embargo, esto
no excluye de padecerlo a otra franjas etarias.