Con el propósito de continuar su obra asistencial y, esencialmente preventiva al servicio del cuidado de la salud, Clínica San Camilo brinda recomendaciones para evitar la Trombosis Venosa Profunda, patología que puede evolucionar a una embolia pulmonar que representa la tercera causa de muerte a nivel mundial en el paciente internado.

La Trombosis Venosa Profunda (TVP) es una afección en la que se forma un coágulo de sangre en una vena profunda del cuerpo. La Dra. Alicia Vilaseca, integrante del Servicio de Hematología de la Clínica San Camilo explica: “Estos coágulos usualmente ocurren en las venas de las piernas. Si el coágulo se desprende podría desplazarse hasta los pulmones, generando un cuadro potencialmente fatal denominado tromboembolismo pulmonar (TEP)”.

Y agrega: “Muchas veces el paciente no tiene síntomas de la enfermedad, por eso es clave hacer prevención en aquellas personas que tienen riesgo aumentado de padecerla”.

¿Cómo advertir si uno es grupo de riesgo?

Una persona puede tener riesgo de TVP si:
· Es mayor de 60 años.
· Permanece en reposo por un largo período de tiempo. Por ejemplo: al recuperarse de una cirugía, al sufrir la fractura de un hueso, mientras vuela en avión, etc.
· Por herencia, es propenso a formar más coágulos sanguíneos de lo normal.
· Está embarazada o recientemente ha dado a luz.
· Tiene sobrepeso u obesidad.
· Tiene várices.
· Padece cáncer, aun cuando esté en tratamiento.
· Presenta insuficiencia cardíaca o enfermedad pulmonar.
· Ha tenido previamente una TVP o TEP.
· Está tomando anticonceptivos o terapia hormonal, incluso aquella para tratar los síntomas post menopausia.
· Tiene un catéter venoso central.