Los petardos y bengalas, una diversión común en las fiestas de fin de año, son explosivos que funcionan con mecha, carga explosiva y pólvora, y su mal uso puede causar grandes daños.
Los petardos y bengalas, una diversión común en las fiestas de fin de año, son explosivos que funcionan con mecha, carga explosiva y pólvora, y su mal uso puede causar grandes daños.
“Es importante recordar que el factor humano es el responsable de las lesiones producidas por la pirotecnia. Se producen como consecuencia del descuido a la hora de manipular elementos explosivos, de los efectos del alcohol y de la imprudencia”, dice Pedro Bilyk, doctor del Centro de Excelencia para Asistencia de Quemaduras (CEPAQ) del Hospital Alemán. El especialista afirma que "si se decide por utilizar la pirotecnia hay que tomar las siguientes precauciones para reducir el riesgo de lesiones: solo debe ser manejada por adultos responsables, sin permitir a los niños manipularla solos.
Estos siempre deben estar acompañados de un adulto en la presencia de explosivos (cohetitos, petardos, bengalas). Hay que comprar pirotecnia autorizada que cumpla con las normas de seguridad, usarla en un espacio abierto y tener un balde de agua a mano.
Leer todas las instrucciones en el envoltorio y asegurarse que los fuegos artificiales estén colocados y apoyados firmemente en el piso o el soporte que venga con el producto.
En caso de lesiones, lavar la herida con agua fría o helada, colocarle paños limpios y humedecidos y concurrir al centro médico más cercano”..