El Hospital Británico cuenta con un nuevo resonador marca Philips Achieva de 1.5 Teslas de última generación, traído desde Holanda, que será utilizado principalmente en estudios neuroradiológicos, así como en el diagnóstico de patologías cardiológicas y músculo-esqueléticas.

La incorporación de esta tecnología médica de imagen de avanzada, que requirió una inversión de más de 4 millones de pesos, permitirá reforzar la atención frente a la creciente demanda observada en el Servicio de Diagnóstico por Imágenes, que supera el millar de estudios mensuales.

“La existencia de un segundo resonador en el Hospital posibilitará además la realización de nuevas prestaciones para beneficio de los pacientes”, explica la Dra. Afonso, Jefa del Servicio de Diagnóstico por Imágenes.

En el campo neurológico, permitirá la realización de espectroscopía, perfusión, tractografía y resonancia funcional, sumándose a técnicas que ya se realizaban como difusión, angio-resonancia y resonancia convencional de cerebro.

Asimismo, órganos como el hígado y el cerebro podrán ser estudiados con más detalle gracias a la presencia en el equipo de una bomba de infusión de doble cabezal, así como también las pequeñas articulaciones en dedos, mano, muñeca y ante-pie, que serán observadas con mayor definición por medio de microbobinas.

Además, facilitará la obtención de imágenes de mayor calidad de angio-resonancias de miembros inferiores como alternativa de técnicas no invasivas con menor riesgo para el paciente.

A diferencia de otros, este resonador posee un túnel más corto, permitiendo a los pacientes claustrofóbicos mayor tranquilidad cuando se acuestan en él.

El nuevo equipo fue instalado mediante un complejo operativo que se llevó a cabo en la intersección de la Avenida Caseros y la calle Perdriel de la ciudad de Buenos Aires, en el que intervino una grúa de gran porte.

El nuevo resonador reemplaza al equipo que fue extraído en enero con el objetivo de cederle piezas fundamentales del mismo al Hospital Garrahan en forma gratuita, y se sumará al resonador que ya se encuentra en actividad en la sede central del Hospital Británico, ubicada en Caseros y Perdriel.