El Hospital Alemán está organizando una nueva campaña informativa para la comunidad con vistas a atender, asesorar e informar a las personas con enfermedades inflamatorias del intestino (Crohn, colitis ulcerosa, etc.)
Del 18 al 22 de junio, en el marco de la Semana de Enfermedades Inflamatorias Intestinales, se ofrecerán consultas gastroenterológicas gratuitas a aquellos miembros del público general que padecen dichas enfermedades. También se darán charlas sobre cómo vivir con estas afecciones para los familiares de quienes los adolecen.
Con un énfasis en la Enfermedad de Crohn y la colitis ulcerosa, ambas afecciones sumamente dolorosas y complicadas, el Servicio de Gastroenterología, liderado por el Prof. Dr Luis Boerr, apunta a dar a conocer estas enfermedades y sus opciones de tratamiento.
Durante esta semana, el Servicio de Gastroenterología y la Sección de Coloproctología del Servicio de Cirugía ofrecerán consultas sin costo a todo miembro del público con dichas afecciones, previa reserva de turno, así como charlas libres y gratuitas en el Auditorio del Hospital el martes 19 y el jueves 21 de junio a las 19 hs.
Para mayor información, contactarse al 4827 7000 y a www.hospitalaleman.com.
Dra. Silvia Pedreira, Jefa del Servicio de Gastroenterología del Hospital Alemán (MN 68107)
“Las enfermedades inflamatorias intestinales se producen por un desequilibrio inmunológico que ataca el aparato digestivo, provocando inflamación, distensión, dolor, diarrea, sangrado, obstrucciones y úlceras. No obstante, sus síntomas son diversos y a veces tan comunes a otras patologías como el colon irritable o las intolerancias alimentarias, que se posterga su diagnóstico correcto.
Un índice importante es la persistencia en el tiempo de síntomas tales como dolores abdominales, nauseas, pérdida de apetito y peso, frecuentes episodios de diarrea, anemia y cansancio general, que pueden indicar una condición crónica relacionada con estas enfermedades. Las más comunes son la Enfermedad de Crohn y la colitis ulcerosa, sobre todo entre los niños y la gente joven y pueden hacerse evidentes por factores como la existencia de una infección intestinal previa, desequilibrios posteriores a un parto o una cirugía.
Se caracterizan por períodos de actividad (brotes) e inactividad (remisión) de duración variable. Si no se tratan correctamente, pueden poner en riesgo la vida de los pacientes al derivar en otras afecciones: además, los niños afectados pueden sufrir retrasos en el crecimiento debido a la imposibilidad de su aparato digestivo de absorber correctamente todos los nutrientes necesarios a su desarrollo.
El buen diagnóstico es fundamental para identificar correctamente los síntomas: se realiza a través de una endoscopía, acompañado de una biopsia o de una exploración radiológica, una tomografía y pruebas de laboratorio especializado, para definir el tratamiento. La interacción de distintos especialistas busca evitar nuevos brotes o reducir su duración con una amplia gama de soluciones farmacológicas, antiinflamatorios, inmunosupresores o quirúrgicas.
Es importante saber que si bien estas enfermedades no son curables, sí son altamente controlables, y la mayoría de las personas que las poseen pueden hacer una vida normal”.