Otra opción para el cáncer de mama
La: Cirugía oncoplástica mamaria se convirtió en una alternativa en el tratamiento del cáncer de mama
15 de marzo de 2012
No caben dudas de que el cáncer es por estos días un problema de salud que afecta tanto a países desarrollados como a aquellos en vías de desarrollo. No hay diferencias, es un tema mundial.
Según estadísticas del Ministerio de Salud de la Nación el cáncer de mama es la principal causa de muerte por cáncer entre las mujeres, mundialmente, se producen alrededor de 1.200.000 casos nuevos por año, que implican más de 500.000 muertes y la Argentina tiene la segunda tasa de mortalidad en el continente, es decir, aproximadamente unas 5400 muertes anuales y se estima que se diagnostican alrededor de 17.000 casos nuevos por año. La curación depende firmemente de un diagnóstico precoz y, en tumores menores a 2cm es de un 80%. Una de las opciones de tratamiento es la llamada cirugía oncoplástica mamaria.
Juan Isetta, miembro del Departamento de Patología Mamaria de Halitus Instituto Médico, puso de relieve que "el ser portadora de un cáncer mamario es motivo de preocupación entre las mujeres de todas las edades, pero para lograr curar la enfermedad, es imprescindible tener un diagnóstico precoz y por lo tanto los controles periódicos son indispensables".
"Una vez presentado y diagnosticado el problema, uno de los tratamientos para el cáncer mamario es la cirugía llamada oncoplástica. Es la realización de cirugías con fines oncológicos utilizando técnicas propias de la cirugía plástica para obtener un resultado oncológico y cosmético satisfactorio. Este tipo de cirugía está indicada ya sea para enfermedad maligna como benigna. Se planifica realizar la incisión de modo que sea lo menos notorio posible, se extrae la cantidad estrictamente necesaria y suficiente de tejido para diagnóstico y tratamiento, se rearma la mama para cubrir el defecto, se sutura con materiales reabsorbibles, se utiliza instrumental delicado para estas cirugías, gran cuidado de la coagulación y la antisepsia", indicó Isetta.
El especialista indicó respecto a la reconstrucción que "puede ser inmediata o diferida, aunque de forma inmediata sería ideal ya que permite tener más piel y el resultado cosmético es mejor. Pero el momento de realizar la reconstrucción se adecua a la situación y al tipo de tratamiento oncológico que recibirá la paciente y se evaluará el tipo de operación acorde a cada caso. Al momento de proponer una cirugía donde se debe extirpar la mama debe explicarse al paciente la posibilidad de una reconstrucción inmediata, teniendo en cuenta las características propias de cada mujer y cada enfermedad, evaluando lo máximo posible qué requerimientos terapéuticos -radioterapia, quimioterapia- serán utilizados".
"El beneficio de este tipo de cirugía es darle a esa mujer la posibilidad de volver a tener un órgano que fue extirpado y cuya ausencia es evidente, recomponer su esquema corporal, disminuye el impacto emocional ante el diagnóstico de cáncer y su agresivo tratamiento, mejora la reinserción a su núcleo familiar, al ámbito laboral y social", comentó.
El médico dijo que las reconstrucciones se pueden realizar "con tejido propio –autóloga- o con prótesis –heteróloga- o bien combinando ambas. Con grasa y piel del abdomen con o sin el músculo recto anterior, con músculo dorsal ancho y grasa y piel de la espalda, con expansor tisular, con prótesis directamente. También Existe la denominada lipotransferencia, que consiste en aspirar tejido graso de abdomen o muslos y reubicar esa grasa en el área de mastectomía o de cirugía conservadora, corrigiendo defectos y mejorando la cosmesis".
"El expansor o la prótesis se ubican debajo del músculo pectoral mayor, mientras que en caso de usar tejido propio se sitúa por delante de éste. También tienen características particulares las prótesis utilizadas para reconstrucción mamaria. “Son prótesis anatómicas, observadas de perfil tienen forma de “gota”. Están compuestas por un gel de silicona autocohesivo, es decir que si se rompe no se disemina, dándole una consistencia similar a la de la mama normal. Posee una cubierta rugosa que permite que, una vez posicionada, la prótesis se adhiera firme y no se mueva más", añadió.
Cáncer de mama: últimos avances
BRCA1 y BRCA2
La predisposición hereditaria al cáncer de mama fue identificada como un síndrome autosómico dominante y, en general, se presenta en pacientes jóvenes. Los genes BCRA 1 y 2 (cromosoma 17q21 y cromosoma 13q13 respectivamente) exhiben funciones de reparación del ADN, estabilidad del ADN y supresores de la carcinogénesis. La mutación de estos genes altera sus funciones, fallando en su actividad. Los cánceres de mama esporádicos (90 al 95%) no tienen esta mutación.
La determinación de esta mutación se solicita habitualmente cuando:
* La enfermedad está presente en dos familiares de primer grado menores de 50 años.
* 3 o más familiares padecen o padecieron cáncer mamario, o cáncer de mama y ovario, o en pariente varón, o descendencia Judía Ashkenazi, o cáncer de mama bilateral.
"Si el resultado es negativo se continúan con los controles habituales. Pero si el resultado es positivo para mutación se planteará realizar una mastectomía bilateral de disminución de riesgo, ya que lo disminuye en un 90%. Si la mutación es solo BRCA , otra opción sería administrar Tamoxifeno a 20 mg diarios porque disminuye el riesgo en un 50%, o bien la extirpación de los ovarios, argumenta", explicó Isetta.
El especialista indicó que "también corresponde el asesoramiento por parte del especialista en genética. Hay que tener en cuenta que el detectar o no una mutación genética informa un riesgo, una posibilidad de desarrollar la enfermedad. No tener la mutación no implica que nunca se enfermará, como tampoco significa enfermedad segura en caso de poseer la mutación".
"Cuando se produce la enfermedad, es posible determinar las características genéticas del tumor mamario, dando lugar a la clasificación molecular, útil para adecuar el tratamiento más específicamente para ese caso en cuanto a la necesidad de quimioterapia en base a la posibilidad de recaída (o sea que también aporta datos pronóstico). Este estudio no se realiza en el país, si bien es posible enviar el material al exterior para su evaluación, el costo es elevado y podría retrasar el inicio del tratamiento sistémico con quimioterapia", concluyó.