Por Leonardo Coscia
El frío y la enfermedad cardio- vascular
12 de mayo de 2009
Con la llegada del frío y las bajas temperaturas, aquellas personas que tienen antecedentes cardiovasculares están más expuestas a sufrir distintas complicaciones en su organismo como una angina de pecho e incluso un infarto agudo de miocardio.
Sergio Muryán, jefe de Cardiología del Sanatorio de los Arcos, explicó que el frío provoca un estrechamiento de las arterias del organismo y puede provocar a nivel coronario disminución de la llegada de sangre.
"Quienes tienen mayor riesgo de enfermarse son los pacientes de mayor edad con patologías asociadas como la diabetes, hipertensión arterial e insuficiencia renal", señaló el médico.
¿Cómo puede el clima frío afectar al corazón?
Muryán dijo que "cuando el cuerpo manifiesta una disminución de la temperatura por debajo de lo normal se presenta lo que se conoce con el nombre de hipotermia. La hipotermia leve es la que oscila entre los 33 y 35º C de temperatura corporal, moderada entre los 32 y 28°C y severa con 27°C o menos".
"Aquellos que manifiestan una hipotermia severa tienen riesgo de presentar arritmias graves, como la fibrilación ventricular, y necesitan un rápido proceso de calentamiento. Los síntomas incluyen: pérdida de coordinación, confusión mental, reacciones lentas, temblor y adormecimiento", añadió.
El cardiólogo señaló que tanto los niños, como los adultos mayores y los portadores de cardiopatías "están en especial riesgo de padecer una hipotermia severa por su dificultad de mantener una temperatura corporal interna adecuada".
¿Qué recomendaciones debería seguir el paciente con enfermedad coronaria?
1. Evitar los cambios bruscos de temperatura (pasar del frío al calor y viceversa) y abrigarse adecuadamente.
2. Limitar los esfuerzos físicos, en particular, al amanecer y al anochecer por ser las horas más frías del día.
3. Restringir la salida de su casa en días de mucho frío (temperatura bajo cero) o con intenso viento.
4. Realizar caminatas preferentemente en horas de la tarde (son las menos frías).
5. Realizar una adecuada digestión posprandial, especialmente luego del almuerzo y de la cena, en un ambiente cálido y tranquilo.
6. Prescindir del consumo de alcohol y de cafeína, porque alteran la regulación de la temperatura corporal.
7. Ingerir líquidos calientes en los descansos para conservar la temperatura y evitar que se presente una deshidratación (es más difícil de percibir con las bajas temperaturas).
8. No recaer en el tabaquismo, dado que la nicotina facilita el espasmo coronario. Tres pitadas de un cigarrillo estrechan los vasos sanguíneos en un 40 % potenciando los problemas vasculares previamente adquiridos.
9. En adultos mayores vacunarse contra el virus de la influenza (gripe) anualmente.
10. En adultos mayores vacunarse contra el neumococo (bacteria que provoca neumonía) cada 4 años.
¿De que manera los cambios climatológicos bruscos provocan un aumento de las enfermedades cardiovasculares?
- Provocan una vasoconstricción en las arterias, entre ellas, las arterias coronarias con una interrupción de la llegada de sangre al miocardio y el consiguiente riesgo de angina de pecho e infarto.
- Aumentan la frecuencia cardíaca y la presión arterial. En pacientes hipertensos el ejercicio físico intenso no controlado, en época invernal, puede acrecentar el riesgo de hipertensión.
- Aumentan la viscosidad sanguínea, con mayor número de glóbulos rojos, de colesterol y fibrinógeno. Esto facilita el fenómeno de trombosis o sea la formación de coágulos en la sangre.
- Incrementan la necesidad de oxígeno del organismo. En épocas de frío están más expuestos a un infarto de miocardio o a una angina de pecho.
- Espasmo a nivel de los bronquios y pulmones (broncoespasmo) dificultando la debida oxigenación de los órganos, entre ellos, el corazón.
- Mayor incidencia de enfermedades respiratorias: gripe y neumonía. Pueden facilitar la descompensación del paciente cardíaco.