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La mujer debe cuidar su corazón más que el hombre
22 de febrero de 2007
“En los últimos años esta visión ha cambiado radicalmente, hoy la mujer padece tanta enfermedad cardiovascular como el hombre”, comentó Marcelo Trivi, Jefe de Cardiología Clínica del Instituto Cardiovascular de Buenos Aires. De acuerdo a las cifras actuales, la enfermedad cardiovascular es la principal causa de muerte en la mujer adulta a cualquier edad. Mientras una de cada 25 mujeres muere de cáncer de mama, una de cada dos mujeres fallece por causa cardiovascular. Asimismo el climaterio aumenta claramente con los años, en especial después de la menopausia, ya que el efecto protector de las hormonas durante la vida fértil es en parte responsable de la falsa creencia de que la mujer esta indefinidamente protegida.
Luego de la menopausia, la frecuencia de enfermedades cardiovasculares aumenta abruptamente en la mujer. El aumento de peso, del colesterol, de la presión arterial y la aparición de diabetes son algunos de los factores que explican el fenómeno pero no todos. “La mujer tiene la falsa creencia de estar protegida y es por ello que se cuida menos y fuma proporcionalmente más que el hombre” explica el especialista. Además, ha adoptado hábitos sociales y laborales que conspiran contra la salud de sus arterias: hace menos actividad física y vive más años que el hombre, lo que paralelamente aumenta el riesgo.
Por tal motivo, desde hace unos años, se intenta concienciar a la población de los riesgos de estos problemas en las mujeres, más preocupadas por sus cuidados ginecológicos y por la salud cardiovascular de sus maridos. “Para ellas es mucho más `importante` el Papanicolau, el examen mamario o la densitometría ósea que la medición del colesterol o la presión arterial” enfatiza el cardiólogo.
Cuando la mujer sufre de problemas cardiovasculares, en especial infarto de miocardio o enfermedad coronaria, tiende a ser más grave que en el hombre. Si bien hay una diferencia etaria, ya que la mujer enferma 10 años más tarde que el hombre, sólo la edad no alcanza a explicar la mayor agresividad de la enfermedad.
Según Trivi, “la mujer con dolor de pecho consulta menos y más tarde que el hombre cuando sufre un cuadro coronario”, porque en la gran mayoría tiene la falsa creencia que su resistencia al dolor es mayor, y a su vez cuando consulta, los médicos tienden a darle menos importancia que al hombre.
Por otro lado hay patologías cardiovasculares menos conocidas pero que son características de las mujeres, como la valvulopatía reumática o la enfermedad mixomatosa de la válvula mitral. El sexo femenino es un predictor de riesgo en algunas arritmias, como la fibrilación auricular. También es un factor de riesgo en el infarto de miocardio y en la cirugía coronaria. A su vez las mujeres son menos consecuentes con los tratamientos impartidos y no los cumplen estrictamente.