Soñar un embarazo o enterarse de que el bebé ya está en camino desata un estado de ánimo colmado de expectativas, emociones y ansiedades. Por tal motivo, la Sociedad de Obstetricia y Ginecología de Buenos Aires (SOGIBA) remarcó que "es importante que la mujer sea conciente de una serie de temas para transitar los meses de la dulce espera en armonía, tranquilidad y bienestar".
Programar una consulta preconcepcional
Para cuidar la salud de la mamá y del futuro bebé, lo ideal es planificar la llegada de un bebé, y en ese caso, realizar una consulta preconcepcional de evaluación integral en la que el médico tomará nota de los antecedentes y hábitos de la mujer para brindarle pautas sobre alimentación, actividad física y sexual; controlará el estado nutricional y pedirá la realización de estudios serológicos.
Tratar las enfermedades de base
En el caso de las mamás con enfermedades preexistentes (cardiovasculares, hipertensión, diabetes, autoinmunes, etc.), es importante la interacción entre los especialistas para adecuar los tratamientos al período de gestación pensando opciones terapéuticas y cambiar –si fuera necesario- la medicación.
Cuidar el peso y la alimentación
El estado nutricional materno es determinante en el crecimiento fetal y en el peso del recién nacido. Así, las mujeres obesas deben ajustar el peso a su contextura antes de quedar embarazadas para evitar complicaciones. Del mismo modo, es fundamental mantener una dieta diversa, saludable y equilibrada que incluya frutas, fibras, verduras y carnes magras. El aumento de peso debe ser controlado de acuerdo a la edad, altura y peso inicial. En términos generales, se recomienda un aumento promedio entre 11 y 12 kilos durante todo el embarazo.
Practicar actividad física
El ejercicio constituye uno de los pilares fundamentales para mantener un estilo de vida saludable durante en el embarazo; será el obstetra quien indique cuándo comenzar y qué deporte practicar. Generalmente, se recomienda bailar, nadar, o simplemente caminar.
Organizar un plan de vacunación
Un plan de vacunación adecuado disminuye el riesgo de enfermedades prevenibles por vacunación. Durante la gestación, se recomienda la vacuna antigripal y la doble adultos (tétanos y difteria).
Suspender hábitos riesgosos
Cuidar la salud de la embarazada es prioritario para el buen crecimiento fetal. Se aconseja no tomar alcohol, dejar de fumar, suspender el consumo de todo tipo de drogas y evitar la automedicación.
Pedir acompañamiento durante el puerperio
La mujer, en especial la primeriza, necesita una contención especial en el período posterior al nacimiento, por lo que es conveniente que reciba apoyo y acompañamiento del entorno familiar.