El ministro de Salud de la Nación, Juan Manzur, aseguró que “desde 2003 se han incorporado cinco vacunas al calendario oficial de vacunación”, lo que constituye “una verdadera revolución en materia de salud pública y prevención de enfermedades” al recibir las primeras 900 mil vacunas antigripales de un total de 7 millones de dosis que serán aplicadas en Argentina durante la Campaña de Invierno 2011 que llevará a cabo la cartera sanitaria nacional.
“No hay antecedentes en la historia sanitaria argentina de que en un periodo tan corto de gobierno se hayan incorporado cinco vacunas como ha ocurrido desde que este proyecto político está conduciendo la Argentina. Me refiero a la vacuna de la hepatitis A, la triple bacteriana acelular, la pentavalente, la antigripal que estamos recibiendo hoy y la vacuna contra el HPV, cuya inclusión en el Calendario Nacional de Vacunación fue anunciada recientemente por la Presidenta de la Nación, Cristina Fernández de Kirchner”, detalló el funcionario.
Según estadísticas del Ministerio de Salud de la Nación, la cantidad de vacunas distribuidas por el organismo en todo el país pasó de 23,9 millones en 2009 a 55,9 millones el año pasado, lo que implica un alza interanual del 133,1 por ciento.
En diálogo con periodistas en el depósito donde se almacenarán las vacunas para su posterior distribución, Manzur recordó que “este año, por decisión de la presidenta de los argentinos, la vacuna antigripal fue incorporada al calendario oficial para los grupos que se consideran más vulnerables”. En este orden, especificó que la aplicación “será gratuita y obligatoria para los niños desde los 6 meses hasta los 2 años, las embarazadas en cualquier momento de la gestación, las madres de chicos menores de 6 meses, las personas que tengan enfermedades de base, todo el personal de salud y también los mayores de 65 años sin cobertura sanitaria”.
“Las dosis comenzaron a llegar en tiempo y forma, de acuerdo a lo planificado. A partir de esta misma tarde empieza la distribución a lo largo y a lo ancho del país. La vacuna va a estar disponible en todos los efectores públicos, como hospitales, Centros de Atención Primaria de la Salud (CAPS), Centros Integradores Comunitarios (CIC) y todos aquellos lugares que sean vacunatorios”, agregó.
En cuanto a la vacuna, el ministro especificó que “se trata de la antigripal trivalente, que es la recomendada por la Organización Mundial de la Salud (OMS) y la Organización Panamericana de la Salud (OPS) para este año porque contiene las cepas del virus A (H1N1), A (H3N2) y B, que sabemos que van a circular”.
Luego de recibir al camión que trasladó las 900 mil vacunas junto al secretario de Políticas, Regulación e Institutos del Ministerio de Salud, Gabriel Yedlin, la directora del Programa Nacional de Enfermedades Inmunoprevenibles, Carla Vizzotti, representantes del laboratorio proveedor y funcionarios de la cartera sanitaria nacional, Manzur se aplicó una dosis.
La incorporación de la vacuna antigripal al Calendario Nacional de Vacunación fue dispuesta a través de la Resolución 35/2011 del Ministerio de Salud, que fue publicada en el Boletín Oficial el 19 de enero último e indica que el de la influenza o gripe “es un virus de fácil diseminación” que “se transmite por vía respiratoria” y “produce enfermedad con mayor riesgo de hospitalización, complicación y muerte en individuos que pertenecen a grupos de riesgo”.
Luego de recordar que el virus de la gripe A (H1N1) causante de la pandemia comenzó a circular en la Argentina en mayo de 2009 y “causó cerca de 10.000 casos confirmados y más de 500 defunciones”, el texto añade que durante 2009 en el país la tasa de transmisión de este virus “fue mayor que en los años previos”.
Asimismo, indica que el año pasado “se ha realizado una exitosa campaña de vacunación antigripal en el 100 por ciento de las jurisdicciones de nuestro país, con gran compromiso de la comunidad médica y de la comunidad en general, en la que se logró alcanzar un 94 por ciento de cobertura de vacunación de la población objetivo”. Esa estrategia, planificada por la cartera sanitaria nacional, “ha tenido un gran impacto en la disminución de la circulación viral, la carga de enfermedad, las complicaciones y la mortalidad en la enfermedad tipo influenza (ETI) y neumonía en la población argentina” durante 2010, añade.