En los últimos días se llevó a cabo la VII Reunión Latinoamericana en Esclerosis Múltiple, realizada en el Hotel Panamericano en Bariloche, provincia de Río Negro.
Organizada por Teva-Tuteur y Teva Pharmaceutical Ltd. y con la presencia de especialistas de Argentina, Brasil, Chile, México, Perú, Uruguay, Colombia y Venezuela tuvieron no sólo el objetivo de informar sobre los nuevos avances en el desarrollo de la Esclerosis Múltiple y su impacto en la progresión de la enfermedad, sino además conocer sobre los desafíos que los nuevos fármacos traerán en un futuro muy próximo.
En el marco del encuentro, Adriana Carrá, neuróloga y Jefa del Área de Enfermedades Desmielinizantes del Hospital Británico de Buenos Aires, presentó los datos a la fecha y las perspectivas futuras de Laquinimod, un nuevo inmunomodulador activo por vía oral que se encuentra en desarrollo clínico avanzado en dos grandes estudios de fase III para el tratamiento de esclerosis múltiple en fase de recaída-remisión (EM R-R).
Los resultados obtenidos sugieren que Laquinimod provoca un efecto terapéutico protector al reducir la desmielinización e inducir la protección axonal y, a su vez, es un candidato potencial para abordar la necesidad aún pendiente en términos de una terapia por vía oral.
Laquinimod recibió la designación Fast Track (aprobación por vía rápida) de la Administración de alimentos y drogas (FDA, Food and Drug Administration) de los Estados Unidos en el mes de febrero de 2009. Dos ensayos clínicos globales de fase III —BRAVO y ALLEGRO— han finalizado la etapa de enrolamiento y se encuentran actualmente en curso.
La esclerosis múltiple (EM) es una enfermedad crónica discapacitante, inflamatoria y neurodegenerativa que afecta a más de 2.500.000 de personas en el mundo (según informa la Organización Mundial de la Salud), de las cuales alrededor de 6.000 se encuentran en la Argentina.
Existen tres tipos de EM: esclerosis múltiple en fase de recaída remisión (EM R-R), forma secundaria progresiva (SPMS, Secondary-Progressive Multiple Sclerosis) y forma primaria progresiva (PPMS, Primary-Progressive Multiple Sclerosis).
La EMR-R es la forma más común de la EM en las personas con menos de 40 años de edad y representa entre el 80 y el 85 %, al inicio de la enfermedad, de las personas que sufren de EM.
Las recaídas que presenta la enfermedad se observan con intervalos irregulares durante un período de varios años, seguido por períodos posteriores de remisión completa o parcial.
En aproximadamente entre el 30 y el 50% de los pacientes, esta forma evoluciona a EM secundaria progresiva en el lapso de seis a diez años.
En la actualidad existen dos líneas de tratamientos para la esclerosis múltiple: el acetato de glatiramer y los interferones beta.
Recientes investigaciones demostraron que el acetato de glatiramer (COPAXONE®) desarrolla un mecanismo de acción que enfrenta todos los aspectos de la enfermedad reduciendo la inflamación, controlando la neurodegeneración e intensificando la reparación axonal.
Un estudio presentado en ECTRIMS 2009 (Alemania) por la doctora Carrá demostró, en 335 pacientes con más de 19 años de seguimiento, el retraso en la aparición de la discapacidad y la reducción en el índice de recaídas.
Según los resultados obtenidos, el 73% de los pacientes tratados con Acetato de Glatiramer redujo el índice anual de recaídas y el 78,64% del mismo grupo permanecen ambulatorios sin apoyo, a pesar de llevar más de 20 años de enfermedad.
Este es un estudio con el seguimiento más largo realizado en la Argentina desde la aprobación y utilización de un fármaco para el tratamiento de la Esclerosis Múltiple.