Por Carina Barber
Jarabe natural adelgazante, depurativo y nutritivo
13 de enero de 2009
Llegó el verano, período de calor, salidas al aire libre, vegetación reverdeciendo, vacaciones. Todo maravilloso y motivador.
Pero para la mayoría de las personas es, sobre todo, la estación de la ropa liviana, brazos y piernas desnudos, y más aún, trajes de baño, que dejan al descubierto alguna obesidad y hasta celulitis que dejó el invierno.
Muchos ya probaron todas las dietas conocidas y por conocer. Algunos lograron resultados, otros no, y los sacrificios que tienen que hacer, muchas veces, son enormes.
Por todo esto, les propongo probar un jarabe del que estuve leyendo e informándome.
No es algo nuevo, es una preparación antigua que se utilizaba para desintoxicar el organismo y que, se comprobó, es un excelente adelgazante y además muy nutritivo.
Pero lo más importante es que es totalmente natural.
El sirope de savia se elabora con la combinación de dos savias: la de arce y la de palma. En el primer caso son preferibles los árboles clasificados como de grado c+, porque contienen un alto porcentaje de calcio, zinc, manganeso y hierro y le proporcionan al cuerpo más minerales y oligoelementos que los otros tipos.
En el segundo caso, sólo la palma de arén produce savia. Aporta la cantidad de sodio y potasio necesarios para el funcionamiento de las células y la desintoxicación del cuerpo.
Este jarabe es muy utilizado para eliminar las toxinas que se acumulan en el organismo por la mala alimentación y la contaminación ambiental.
Es un tratamiento estricto, pero de corto plazo, que consiste en una cura de efecto depurativo, que ataca los depósitos grasos.
Tratamiento:
Para preparar el organismo antes de empezar el ayuno de desintoxicación, es necesario ir eliminando de a poco las bebidas alcohólicas y con gas, las frituras, las carnes, las harinas y los dulces.
Tres días antes y tres días después del tratamiento se debe realizar una dieta en la cual hay que combinar el sirope de savia con jugos, naranja, frutas, caldo de verduras y arroz integral.
Durante los tres primeros días se debe tomar: medio litro de sirope el primer día, tres cuartos el segundo y un litro el tercero. Los tres últimos: un litro el primer día, tres cuartos el segundo y medio el tercero.
El tiempo recomendado del tratamiento es de siete a diez días, para que se observen sus beneficios. En esta etapa sólo se bebe el sirope de savia, entre ocho a diez vasos por día.
Los primeros tres días el cuerpo se alimenta de las reservas almacenadas en forma de azúcar simple. Luego, el organismo empieza a eliminar toxinas y a reducir sus reservas de grasa.
Preparación:
Los siete a diez días de tratamiento, hay que preparar diariamente un recipiente de 2 litros mezclando 1.800 ml de agua, 100 ml de sirope de savia, 100 ml de jugo de limón fresco y un poquito de pimienta de cayena.
La pimienta de cayena ayuda disolver las flemas y a regenerar la sangre. Contiene capsaicina, un estimulante digestivo que favorece la hipersecreción gástrica y aumenta la motilidad, y vitaminas A, B1, B2 Y C. Además tiene un efecto tónico general antiedematoso y antihemorroidal.
El limón natural estimula la eliminación de los depósitos de grasa, aporta minerales (sobre todo potasio y vitaminas C y P) que es fundamental para fijar el calcio, es antialérgico, antiinflamatorio y antihemorrágico.
La vitamina B1 disminuye los nervios y la irritabilidad y la B2 participa en el metabolismo de los ácidos grasos, proteínas y aminoácidos, que contribuye con la disminución del peso.
Resultados:
Las personas que lo han hecho, afirman que se obtienen resultados excelentes:
-Refuerza las defensas del organismo.
-Disminuye el volumen graso y el colesterol malo.
-Normaliza la presión arterial.
-Atenúa las alergias.
-Mejora la piel.
-Se pierde peso y se controla la obesidad.
-Produce una mejoría psicosomática.
-Regula y mejora el metabolismo.
-Elimina el estreñimiento.
Recomendaciones:
Como este tratamiento de desintoxicación es muy estricto y debe ser realizado a la perfección, las personas que tengan enfermedades crónicas o que deban tomar medicamentos permanentemente deben consultar con su médico de cabecera o nutricionista.
No deben realizarlo niños, mujeres embarazadas o que estén en período de lactancia, ni personas hipotensas.
Durante el ayuno con sirope sólo, debido a la eliminación de las toxinas, se pueden producir algunas pequeñas molestias que duran un par de días, como dolor de cabeza, más sudor y que la lengua se ponga blancuzca (es poco común), pero son síntomas de que el cuerpo se está depurando.
Durante la dieta está prohibido ingerir té, café, medicamentos y vitaminas.
Los consumidores asiduos de cigarrillos, alcohol o fármacos suelen reaccionar mal al tratamiento.
El jarabe de arce y palma tiene un sabor parecido a la miel, y para conseguirlo hay que consultar en dietéticas importantes que vendan productos naturales.