Por Carina Barber

Los bebés, desde que nacen y hasta que comienzan a caminar, y luego a dejar los pañales, están predispuestos a padecer de paspaduras o dermatitis de contacto. Estas lesiones se producen por fricción, y en la zona del pañal por la oclusión que este provoca y la irritación que causan la orina y las heces (por mantener la piel expuesta casi constantemente a la humedad).

Cuando comienzan a gatear, etapa muy importante en su desarrollo intelectual y motriz, los pequeños, debido al roce de las rodillas, entrepiernas y brazos, suelen sufrir paspaduras.

La piel cambia de color, se enrojece, se altera su textura pudiéndose volver más seca o más húmeda. Estas lesiones causan picazón y ardor, además de malestar a los niños.

Por este motivo es importante tratar el área afectada con productos especiales indicados por pediatras y mantener la hidratación de la piel.

El roce con el pasto, tierra, pisos secos o húmedos, o con la misma piel (como en la zona del cuello) favorece la aparición de leves paspaduras, provocando una lesión o enrojecimiento localizado de la piel.

El pediatra Diego Pochat, Titular de la Sociedad Argentina de Pediatría y Ex Jefe de Residentes del Hospital de Niños Ricardo Gutiérrez, afirma que las zonas lesionadas deben ser tratadas de forma inmediata con los productos adecuados indicados por los especialistas, para que no empeoren o se contaminen.

Las paspaduras se pueden infectar tanto por bacterias como por hongos. La contaminación de las lesiones pueden ser de origen externo o por auto infección del propio bebé, que al sentir la picazón y el ardor se rasca con las uñas sucias (inevitables en período de gateo).

Para prevenir este tipo de lesiones se aconseja humectar la piel permanentemente con este tipo de productos, tratar que el bebé gatee en ambientes limpios y seguros, vestirlo con ropa de algodón o de hilo, y cubrir toda la superficie corporal, en especial las zonas de roce.

Además se recomienda tratar el área afectada al comenzar los signos de irritación, colocando talcos o pomadas que eviten paspaduras, ricos en Vitamina A, Óxido de Zinc y Ácido bórico. Muchos de estos productos, de reconocida trayectoria cuentan con descuento de las obras sociales, como los de los laboratorios Andrómaco, dedicados a la terapia de la piel.