Mientras se desarrollaba la 57ª Convención Anual de la Cámara Argentina de la Construcción ( CAC), al mediodía se conoció este comunicado de APYMECO -Asociación Pymes de la construcción- que trazó un duro diagnóstico del sector por la caída en la actividad y la falta de pago de la obra pública por parte del Estado, que en algunos casos tienen atrasos de un año para cobrarle a la Provincia de Buenos Aires .
Los empresarios del sector afirman que, tras varios meses de caída ininterrumpida de la actividad y subas de costos provocadas por la inflación en insumos clave para la construcción, hay empresas que están al borde de la quiebra y muchas tuvieron que despedir gente por la complicada situación financiera de las Pymes.
Desde la entidad –que desde hace 9 años representa los intereses de las Pymes del Gran La Plata- aseguran que se empezó a romper la cadena de pagos y que la falta de pago en los certificados de obras públicas hizo que las empresas tengan un nivel de endeudamiento muy alto.
El panorama –señalan los empresarios nucleados en APYMECO- es más complicado desde que se conoció que el gobierno bonaerense pagará deudas de obra pública con un bono, teniendo en cuenta que el 90% de las empresas constructoras que funcionan en la Provincia de Buenos Aires son Pymes.
El comunicado, en parte, confirmando lo expresado por Enrique Wagner, presidente de la CAC en la apertura de la Convención, señaló que existen atrasos de 120, 150, 180 y hasta 365 días para cobrar los trabajos realizados en obra pública y si a esto se le suman las cargas impositivas (pago de IVA e ingresos brutos por adelantado durante 5 y 6 meses hasta cobrar el primer certificado de obra), las Pymes se quedan sin capital de trabajo ni posibilidades de pagarle tanto al personal como a proveedores.
Los retrasos en los pagos llevan a las empresas a dejar de presentarse en las licitaciones públicas porque no les resulta rentable participar de las mismas ni arriesgar su capital para encarar una obra que no saben cuándo la van a cobrar.
También remarcaron desde APYMECO su preocupación por la falta de financiamiento del circuito financiero a las empresas del sector, en especial a las Pymes, y las tasas usurarias que cobran para los descubiertos bancarios.
La construcción tiene un poderoso efecto multiplicador a través de la demanda de insumos, ya que cada $ 100 invertidos en construcción se genera una inversión adicional en la actividad económica de $ 80.