El presidente de la Asociación Pymes de la Construcción (APYMECO), José Del Río, advirtió su preocupación por los fuertes atrasos en los pagos que sufre el sector por parte del gobierno bonaerense, "que en algunos casos superan los 210 días".
Añadió que “esta situación deja a las empresas en un estado de crisis que puede llevarlas a la quiebra y que, como consecuencia de ello, pueden desencadenarse cientos de despidos".
La falta de pago en obras públicas hizo que las empresas tengan un nivel de endeudamiento muy alto. “Se empieza a romper la cadena de pagos, con sus efectos ciertos en la economía real en un sector que tiene incidencia directa e indirecta en distintas ramas de la economía", indicó Del Río.
Subrayó que "la actividad empieza a resentirse con fuerza y los retrasos en los pagos llevan a las empresas a dejar de presentarse en las licitaciones públicas porque no les resulta rentable participar de las mismas ni arriesgar su capital para encarar una obra que no saben cuándo la van a cobrar".
"El gobierno provincial afirma una y otra vez que va a profundizar la obra pública para esquivar la crisis, pero si los pagos de certificados de obra, que habitualmente se deben realizar en 45 días, se hacen a los 180 ó 210, no hay obras viables para las empresas, en especial para las pymes bonaerenses", afirmó el presidente de APYMECO.
Precisó que la Provincia de Buenos Aires "reprograma mes a mes los pagos y que eso conspira en la ecuación financiera de las empresas para planificar el trabajo a mediano y largo plazo y enfrentar los pagos de personal".
"El gobierno provincial fue claro en cuanto a apostar a la obra pública para esquivar la crisis. En consecuencia, nosotros tomamos más gente e iniciamos obras, pero como ahora no nos pagan están convirtiendo a un sector que estaba con un menor ritmo de actividad en un sector endeudado y en crisis", señaló Del Río.
Pero, "de persistir esta situación en el tiempo, puede haber despidos". En este sentido “la construcción es multiplicadora de actividad y empleo, pero cuando se para tiene el mismo efecto, pero negativo y con eso se perjudica a distintas actividades económicas".
Del Rio enfatizó que muchas pymes desistan de participar en las licitaciones públicas porque, en algunos casos, los presupuestos oficiales no están actualizados y no pueden sostener el plazo que corre desde la compra del pliego hasta la finalización del cobro de la misma”.
Asimismo, manifestó su preocupación por "la falta de financiamiento del circuito financiero a las empresas del sector, en especial las pymes, y las tasas casi usurarias que cobran para los descubiertos bancarios".
"El Estado salió a apoyar a otros sectores de la industria: fabricantes de autos, bicicletas, electrodomésticos, pero para nuestro sector todavía no hubo nada", reclamó el titular de APYMECO.