Bancos y cajas españolas acumulan viviendas y locales para contener el volumen de impagados. Los problemas de las inmobiliarias para atender los préstamos contraídos han llevado a las entidades a aceptar la entrega de propiedades como pago.
Esta fórmula ha contenido parcialmente la subida de la ratio de dudosos, que en noviembre se situaba en el 3,18%, según el Banco de España.
Los cinco grandes entidades financieras nacionales acumularon el pasado ejercicio inmuebles por 7.047 millones de euros. De esta cifra, 3.668 millones corresponden sólo al Grupo Santander (2.634 millones del propio Banco Santander y 1.134 millones de su filial Banesto). BBVA suma 629 millones, La Caixa otros 550 millones, Caja Madrid 600 millones más y, finalmente, Banco Popular contabiliza entre 1.300 y 1.500 millones de euros.
Banco Sabadell, que se considera parte de la banca mediana, informó hace una semana que atesoró propiedades valoradas en 800 millones de euros.
Estas maniobras no han impedido que las tasas de impagados se hayan desbocado durante el ejercicio, azuzadas por la contracción del crédito (que ha frenado la masa total de crédito sobre la que se calcula la mora) y la subida del paro (que ha fomentado las irregularidades en el pago).
En el caso del Santander y BBVA, esta ratio se duplicó, al pasar del 0,95% al 2,04% en el grupo que preside Emilio Botín y del 0,89% al 2,12% en el que encabeza Francisco González.
El deterioro de los impagados fue aún más marcado en Banco Popular, donde se triplicó al subir del 0,83% al 2,81%. La Caixa multiplicó la mora por 4,5 (fue del 0,55% al 2,48%). Aún así, el caso más dramático corresponde a Caja Madrid. La firma que preside Miguel Blesa quintuplicó sus préstamos dudosos en el ejercicio. Pasaron del 0,90% al 4,87%. Pero lo que es más preocupante es que la tendencia no tiene visos de cambiar.
La cúpula de Santander vaticinó la semana pasada que la morosidad de todo el sistema financiero nacional rondará el 8% al cierre de 2009 por el deterioro económico del país. Al tiempo que los impagados crecían el pasado año, las ratios de cobertura sustentadas en las provisiones genéricas de carácter anticíclico se han deteriorado.
Ninguno de los cinco grandes cuenta ya con una cobertura del 100%. La ratio más amplia corresponde a Santander y BBVA (ambos la sitúan en el 91%), y la peor es la de Caja Madrid (46,6%).
Expertos del sector estiman que las provisiones genéricas se consumirán a partir de una morosidad de entre el 5% y el 5,5%. Por eso, los grandes bancos y cajas han optado por realizar provisiones millonarias adicionales a las que exige la normativa.