Por Arturo Navarro
Un falso debate por el aumento de retenciones
2 de diciembre de 2007
Algunos dirigentes políticos y gremiales empresarios estas confundiendo a la opinión pública con sus declaraciones, al pretender buscar culpables y querer identificarlos a quienes registraron determinadas volumen de soja para la exportaciones, en vez de hacer una critica general a las retenciones a la exportación y al manejo de las misma por parte del gobierno, que es la causa principal de lo que esta ocurriendo con las mercados de granos. Quienes operaron en los mercados de granos, exportadores y grandes productores, actuaron en función al derecho que le permitían las normas.
Las condiciones de comercialización que existen en la argentina son similares a todos los países exportadores de granos. En el caso de Brasil no tienen la rigidez que tienen en el nuestro. Lo unico que diferencia a la argentina con el resto, es que somos los únicos que aplicamos un impuesto para exportar a todos los productos y cambiamos las reglas de juego en medio del ciclo de produccion, motivo que provoco el actual debate por el registro de exportación de porotos de soja y de los subproductos.
Solamente con una resolución menor del área específica, se podría haber evitado este debate, si se hubiera cerrado el registro de exportación de soja, como se hizo con el del maiz y el del trigo que esta cerrado desde el mes de marzo en este último caso.
Decir que las retenciones a un 35% son confiscatorias es aceptar una retención menor. Hablar de retenciones flotantes es trabajar con un riesgo político para en los mercados a futuro que se descuenta en el precio final al productor. Justificar este impuestos como un mal impuesto a las ganancias es cargar sobre el contribuyente cumplidor y eficiente con una doble carga impositiva. Hacer propuesta de que las retenciones sean reemplazas por un impuesto a la tierra es una propuestas totalmente interesada pensado únicamente en su empresa para quedar bien con el gobierno y sin pensar las grabes consecuencia que tiene un sistema como este para el productor y para el pais.
El argumento de la recaudación de una “prevalía que determina un funcionario” sobre un determinado precio en el mercado mundial, es para hacer una equitativa distribución de esa ganancia extra, es desconocer que el unico sistema que puede cumplir con ese objetivo, es una moderna reforma impositiva y una nueva ley de coparticipación como determina nuestra constitución nacional, unico sistema que nos a va a permitir un crecimiento sostenido a trabes de los años.
Mientras tanto nada de escucho decir a eso misma dirigentes sobre un tema mucho mas importantes para el pais, que el aumento de las retenciones fue mayor para los productos elaborados que para la materia prima, decisión que va en contra de los intereses de pais porque no promueve la transformación de la materia prima y hace que los productos se exporten sin valor agregado. Esta decisión además, estan en contra de los lineamientos expresado por la candidata electa a Presidente de la Nación Cristina Kischner en sus manifestaciones publicas y que las terminan institucionalizando con la creación del nuevo Ministerio de Ciencia, Tecnología e Innovaciones Productivas.
Tampoco se escucho reclamar a la dirigencia sobre la perdida para el pais de 1000 millones de dólares al mantener el mercado de trigo para exportar desde el mes de marzo al no aprovechar los altos precios internacionales antes que se cayera el mercado. Lo mismo esta ocurriendo con le marcado de maiz, motivo por el cual seria muy importantes encontrar una rápida solución a estos temas, aunque no sea lo que uno defiende, que sea las normas que van a funcionar en forma permanente para que los todos los operadores de las cadenas sepan cuales son las reglas de juegos de cada uno y dejemos de enfrentarnos entre los miembros de la misma cadena.
Los intereses del pais y sus ciudadanos son muchos más importantes que los intereses de cada uno de nosotros. Lo unico que tiene que hacer el estado, es permitir que cada uno de los emprendedores e innovadores argentinos puedan desarrollar todas sus capacidad individual, en un marco de previsivilidad y sustentavilidad en el tiempo, para poder aprovechar las extraordinarias condiciones extraordinarias que nos presenta el mundo, para poder aumentar nuestras exportaciones transformada con tecnología y mano de obra argentina.