La mujer declaró a la Policía británica haber visto a un hombre escondido en unos arbustos fuera del departamento donde estaba la niña, la noche que desapareció
Una niñera que trabajaba en el complejo turístico de Ocean Club, en la localidad portuguesa de Praia da Luz, declaró a la Policía británica haber visto a un hombre escondido en unos arbustos fuera del departamento donde desapareció la niña británica Madelaine McCann, el 3 de mayo último.
El hombre tendría de 25 a 35 años, parecía un vecino local y llevaba pantalones claros y camisa azul.
Los padres de la menor, los médicos británicos Kate y Gerry McCann, sobre quienes pesan sospechas, expresaron estar "muy agradecidos" por el testimonio.
"La evidencia apoya lo que dijimos siempre: a Maddie un secuestrador la sacó de su cama", dijo el vocero de los padres, Clarence Mitchell. La niñera habló con la Policía británica pero no con los detectives portugueses a cargo de la causa.