El seleccionador alemán. Juergen Klinsmann, se mostró confiado y tranquilo de cara al partido de semifinales contra Italia, que calificó de "auténtico clásico" y de "partido sensacional".

"Estamos bien. Tenemos confianza y estamos plenamente concentrados", dijo Klinsmann, poco antes de partir con el equipo para Dortmund, en donde se disputará la semifinal.

Klinsmann indicó que la confianza viene del rendimiento que ha tenido Alemania a lo largo del torneo que ha hecho que incluso grandes selecciones, como Argentina, muestren un gran respeto por su selección.

"Fue interesante ver como Argentina, un equipo que había sido altamente elogiado con razón, adaptó su alineación y su táctica a nuestras características", dijo Klinsmann que en esto días ha bajado notoriamente el ritmo de entrenamiento de sus jugadores para darles tiempo de recuperarse.

Klinsmann además se mostró plenamente confiado en que quienes hasta ahora han sido suplentes responderán en caso de tener que salir al campo como ya lo han hecho David Odonkor, Tim Borowki u Oliver Neuville.

"Si hay bajas, no tenemos mayores preocupaciones, cada posición está ocupada al menos por dos jugadores hambrientos de jugar y que están esperando su oportunidad", aseguró Klinsmann.

Por otra parte, el seleccionador se mostró satisfecho de la euforia que está generando su equipo y se mostró convencido de que ésta se está dando no sólo dentro de Alemania sino donde quiera que haya alemanes en el mundo.

"Estoy seguro de que también en Estados Unidos y en otras partes del mundo ondean banderas alemanas. Creo que los alemanes que no están en el país gozan con este equipo en Sidney, en Tokio o donde quiera que estén", dijo Klinsmann.