Con una fuerte aceptación del público, se quedó en “Bailando por un sueño” tras una semana en la cual su sentencia provocó una crisis con su pareja, Graciela Alfano
Por Roberto BlancoEl clima tenso fue el sinónimo de una noche cargada de suspenso y de conflictos maritales en “•Showmatch”, que derivó con la continuidad de Matías Alé y su soñadora en “Bailando por un Sueño” tras alcanzar el 68 por ciento de la aceptación popular y dejar eliminados A Rocío Guirao Díaz y su pareja, quienes fueron votados por el 32 por ciento de los espectadores.
Sin embargo, la sentencia de Alé sirvió durante la semana que pasó para convertirlo en “el tema mediático” de esos días con la pelea del bailarín con Graciela Alfano –integrantes del jurado—por la resolución de la posibilidad de eliminación del participante.
Caras largas, miradas lánguidas, silencios misteriosos, ojos llorosos, fueron los condimentos con los cuales los programas “chimenteros” llenaron la pantalla de sus ciclos diarios desde el miércoles pasado.
Como era de imaginar, con el show ya montado, muy pocos dudaban que Alé y su soñadora, Gisela Bernal, quedaran sentenciados para la eliminación del llamado telefónico y no fueran salvadas previamente por el jurado.
La que gozo de ese beneficio fue la debutante Cinthia Fernández, quien reemplazo a la ofendida Catherine Fulop que en una crisis de nervios renunció durante la semana por acumulación de “estrés” provocada por los votos del jurado que no la venían beneficiando.
La joven polémica, Fernández, que es cierto, bailó muy bien el tema de Shakira que le tocó en suerte, fue salvada por el jurado por 3 votos a 1, y dejó a Alé y Guirao Díaz en la definición del voto del público.
Previamente, Alfano aclaró a los espectadores y sus compañeros de jurado que no se abstendría de votar en la definición del salvataje de una pareja y fundamentó esta posición en que se sentía “preparada para ser justa y ecuánime” en la decisión y agregó que “mas allá de cualquier pedido, a pesar de que somos marido y mujer, acá yo soy el jurado y Matías es un participante”.
Desde el centro de la pista, caracterizado como el Michael Jackson del subdesarrollo, Alé la mirada con los ojos llenos de lágrimas y tragaba saliva ante la determinación de su mujer de no cumplir con su pedido.
Finalmente Alé se salvó con holgura y se convirtió junto a Barral en la novena pareja finalista del concurso que ya ingresó en la cuenta regresiva.
La crisis de pareja de estos dos personajes mediáticos fue fiel a su historia y en vez de resolverla en la intimidad, se ventiló en la “pantalla caliente” de “Showmatch” que fue lo más visto del día con picos de 29, 4 puntos de rating.
El joven enamorado reconoció que la crisis existía y que vivieron una “semana muy difícil” y aceptó que hubo una “pelea muy fuerte” entre ambos tras el pedido de Alé que su mujer se abstenga de votar.
“Esto pasó porque no estamos acostumbrados a discutir”, mientras Alfano fue un poco más hermética y solo puntualizó que el futuro de la pareja que ya lleva ocho años, depende de la “negociación”.
Una versión un poco menos romántica del tema cuenta que el fondo de la crisis de la pareja se debería a las muchas propuestas que recibe Alé desde que desplegó su personaje de “showman” en el programa de Tinelli y que la mayoría de ellas no incluyen justamente a la vedette.
Alguien cercano a la pareja susurró: “Siempre trabajaron juntos y ella siempre lo impuso a él en sus propuestas laborales, ahora que se dio vuelta la tortilla , Graciela espera el mismo gesto de Matías”.
Lo cierto es que, todo lo sucedido en la semana, benefició a Alé quien ganó con comodidad el votos del público en el doble rol de hombre gracioso y de “moco fácil” a la hora de las emociones.