El auditorio que escuchaba al presidente de EE.UU. no aguantó las risas ante los repetidos errores del hombre más poderoso del mundo. Conozca aquí los graciosos furcios
George Bush hizo honor a su mala fama y volvió a meter la pata.
Ante un grupo de líderes empresariales, el hombre más poderoso del mundo se confundió la cumbre del Foro de Cooperación económica APEC (donde disertaba) con la OPEP, la organización de países petroleros.
Después, se refirió a los australianos como austriacos.
Y al finalizar, se equivocó de salida y debió ser asistido por el premier australiano.
El presidente de EE.UU. sumó así más material para las recopilaciones que se vienen haciendo sobre sus errores durante los discursos. Los denominados "Bushismos" ya abarcan más de siete libros y son un verdadero negocio. Esta vez fue en Australia.