La inflación en agosto para los sectores más pobres de la población fue más de tres veces superior a la suba promedio de los precios, según informó hoy el Instituto Nacional de Estadística y Censos (INDEC).

La Canasta Básica Alimentaria (CBA) -que mide la indigencia- aumentó 2,2 por ciento y alcanzó un valor de 442,03 pesos para una familia tipo.

En tanto, la Canasta Básica Total (CBT) subió 1,7 por ciento y se ubicó en 945,95 pesos para un grupo compuesto por un matrimonio y dos hijos. El nivel general del índice de precios al consumidor para Capital Federal y los partidos del Gran Buenos Aires fue en agosto de 0,6 por ciento.

Con los resultados difundidos hoy la CBA acumuló desde enero un aumento de 6,6 por ciento, mientras que la CBT subió en ocho meses 5,1 por ciento. La CBA está compuesta por un conjunto de alimentos básicos para la manutención de dos mayores y dos menores y los grupos que no alcanzan ingresos por el valor fijado son considerados indigentes.

En tanto, la CBT incorpora a los alimentos una serie de servicios mínimos y las familias con recursos por debajo de ese valor entran a la categoría de pobres para las estadísticas oficiales.

Durante agosto la suba de la CBA y de la CBT estuvo seriamente influenciada por los aumentos de precios en productos esenciales como la papa que subió casi un 24 por ciento, el tomate que aumentó 23 por ciento y el pan que tuvo un nuevo ajuste de 1,9 por ciento.

Según el INDEC la carne aumentó sólo 0,3 por ciento. Los productos promocionados como sustitutos como el pollo subió 1,1 por ciento y el pescado se mantuvo sin cambios, mostrando desde enero un avance de 24,9 por ciento.

El aceite de maíz subió 4 por ciento en agosto y 9,3 por ciento en ocho meses, mientras que el mezcla tuvo una variación de 0,8 por ciento en el último mes y 19,5 por ciento desde el inicio del año.

La leche aumentó 1,3 por ciento, la manteca 2 por ciento y los quesos tuvieron alzas que van desde el 0,6 por ciento (pate grass-) hasta 1,5 por ciento (queso crema).