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3 de diciembre de 2024
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Detuvieron al marido de la maestra asesinada con un puñal
Todo resulta sospechoso. La mujer había sido asesinada tras retirar $ 800 de un cajero. El viudo incurrió en varias contradicciones al contar su versión
31 de agosto de 2007
El marido de la docente asesinada este viernes de una puñalada en el departamento mendocino de Guaymallén, fue detenido este mediodía ante la sospecha de que está vinculado con el crimen de su esposa, informaron fuentes judiciales.

La docente fue asesinada esta madrugada de una puñalada, a la salida de un cajero automático al que había concurrido junto a su esposo, por dos delincuentes que huyeron tras concretar el crimen.

El hecho ocurrió a las 2.30 cuando Sandra Mónica Díaz, de 40 años, y su marido, Pedro Ramírez, de 35, fueron abordados por los asaltantes cuando salían del cajero automático ubicado en la entrada del hospital Notti, en la calle Bandera de los Andes al 2700 de Guaymallén.

Los investigadores consideran que el marido, a quien los delicuentes le provocaron lesiones leves, incurrió en muchas contradicciones durante sus declaración ante la justicia.

El episodio comenzó cuando la docente y su marido extrajeron 800 pesos del cajero automático, tras lo cual se retiraron y subieron en un automóvil Volskwagen Polo.

Según las primeras versiones de la policía, la pareja fue sorprendida por dos hombres armados con un puñal, al detener su auto en un semáforo. Las primeras versiones de los investigadores detreminaban que los delincuentes los amenazaron y subieron al asiento trasero del vehículo.

De acuerdo con la denuncia del marido de la docente, se produjo un forcejeo, los ladrones se apoderaron de los 800 pesos y quisieron llevarse el coche.

En ese momento, la docente entró en estado de pánico y comenzó a gritar pidiendo ayuda. Para acallar a la víctima, uno de los ladrones le hizo un corte en un brazo pero lejos de calmarse, la mujer gritó aún más, por lo que el delincuente le aplicó una puñalada en el tórax.

Ramírez mientras tanto, forcejeó con el otro delincuente y recibió heridas cortantes, tras lo cual los asaltantes huyeron del lugar.

El hombre caminó hasta la administración de un hotel alojamiento cercano llamado Le Privé, y pidió ayuda, los efectivos concurrieron al lugar de inmediato.