La Reserva Federal de Estados Unidos (FED) colocó este lunes fondos por 3.500 millones de dólares en los mercados para garantizar que la crisis desatada en el sector hipotecario no afecte la liquidez.

Desde el 9 de agosto, la FED inyectó 97.500 millones de dólares para calmar los mercados e incluso el viernes redujo sorpresivamente las tasas de interés de redescuentos en medio punto, al 5,75 por ciento, recordó un cable de la agencia DPA.

Hoy, por tercera jornada consecutiva, también el Banco de Japón colocó en el mercado un billón de yenes (equivalente a 8.730 millones de dólares) para frenar el alza de las tasas de interés de corto plazo.

De esta manera, el banco emisor nipón inyectó durante las últimas tres jornadas bursátiles 2,6 billones de yenes.

La Bolsa de Nueva York terminó en leve alza este lunes, al cierre de una sesión volátil, en la que los inversores se mantuvieron prudentes sobre las perspectivas de la crisis de los créditos a riesgo "subprime": el índice Dow Jones subió 0,32% y el Nasdaq 0,14%.

El Dow Jones Industrial Average (DJIA) ganó 42,27 puntos para cerrar en 13.121,35 puntos y el índice compuesto del Nasdaq avanzó 3,56 puntos a 2.508,59 según cifras definitivas de cierre.

El índice ampliado Standard and Poor's 500 descendió por el contrario 0,03% (-0,39 punto) a 1.445,55 unidades.

"La incertidumbre se mantiene, el mercado encuentra dificultades para encaminarse", subrayó Michael Malone, analista de Cowen & Co.

"Por un lado, se mantiene un nivel bastante elevado de inquietud sobre la salud del mercado de crédito, pero por otro, la decisión de la Fed de bajar su tasa de descuento el viernes es claramente positiva", agregó.

La Reserva Federal (Fed) había reducido súbitamente su tasa de descuento en 0,50 punto a 5,75%, subrayando que existe un "incremento importante" del riesgo para el crecimiento a causa de la actual turbulencia que afecta a los mercados financieros. Estos han sido sacudidos en las últimas semanas por la crisis del sector hipotecario a riesgo ("subprime") en Estados Unidos.

La intervención de la Fed, cuyo objetivo era según el banco central "restaurar condiciones financieras ordenadas en los mercados financieros", fue acogida con entusiasmo en la Bolsa de Nueva York el viernes.

"La tormenta en Wall Street se debilitó pero no pasó", estimó sin embargo Frederic Dickson, analista de D.A. Davidson, subrayando que serán necesarias "más que algunas sesiones" para restablecer la confianza de los inversores.

El único indicador económico del día, el índice compuesto de indicadores económicos estadounidenses, que se supone prefigura la evolución de la conyuntura en los próximos seis meses, subió 0,4% en julio, haciendo presagiar la continuación del crecimiento a un ritmo lento, según el instituto de coyuntura privado Conference Board.

En el mercado obligatorio, el rendimiento del bono del Tesoro a 10 años bajó a 4,634% contra 4,673% en la noche del viernes y el de los títulos a 30 años a 4,970% contra 5,000%. El rendimiento de las obligaciones evoluciona en sentido opuesto a sus precios.