La Bolsa porteña sufrió hoy otra dura caída en las acciones líderes que llegó a rozar el 9 por ciento al promediar la rueda, pero sobre el final recortó pérdidas y cerró con una baja del 4,72 por ciento y una moderada expectativa sobre lo que podría ocurrir este viernes.

En tres días, los papeles líderes de la bolsa se desbarrancaron un 11,2 por ciento, para reflejar la magnitud de la caída, la más pronunciada del año.

Al promediar la jornada, tanto el presidente Néstor Kirchner como el ministro de Economía, Miguel Peirano, buscaron llevar tranquilidad a los mercados y señalaron que la economía local está sólida y no tiene por qué contagiarse de la crisis de liquidez que existe en los mercados internacionales.

En los Estados Unidos, el índice industrial Dow Jones llegó a perder más del 2 por ciento, pero al final terminó en equilibrio, en parte por la inyección de 12.000 millones de dólares en el mercado bancario por parte de la Reserva Federal de Estados
Unidos, que funcionó como un alivio para los mercados.

Los bonos de la deuda argentina perdieron hasta 8,5 por ciento, aunque llegaron a caer 11, y el riesgo país volvió a trepar, un 8,5 por ciento.

El panel líder de la Bolsa local cayó a 1.833,71 puntos.

Todo indica que el mercado de crédito no será el único que pagará las consecuencias de esta debacle, ya que los órganos de control comenzaron a poner la lupa sobre agencias de calificación que no alertaron sobre el paso en falso de las denominadas
"hipotecas subprime", destinadas a los pequeños y medianos compradores y que desencadenaron esta crisis al volver insolventes.

Los desarmes de carteras para refugiarse en dólares o activos seguros se reflejaron en un monto operado con acciones de $277,5 millones (u$s86,1 millones), un nivel que no se alcanzaba desde diciembre de 1995.

El índice Merval del mercado de Buenos Aires finalizó a 1.833,71 puntos, luego de mostrar una caída máxima del 8,99 por ciento, a 1.751,75 unidades, al promediar la jornada.

Las tasas interbancarias (call money) treparon hasta el 15 por ciento ante la falta de liquidez que afecta la plaza financiera local.

La fuerte crisis que afecta a todos los mercados golpea también la plaza local y tiene impacto directo en las tasas que pagan los bancos para hacerse de dinero.

En tanto, Wall Street recortó las pérdidas sobre el final de la operatoria, para cerrar el Dow Jones de Industriales en 12.847 puntos, con una baja marginal de 0,11 por ciento.

Asimismo, el Nasdaq de empresas tecnológicas descendió 0.32% y el indicador S&P logró avanzar 0.34 por ciento.

La Reserva Federal destinó 17.000 millones de dólares al mercado financiero para asegurar su liquidez frente la estampida de inversores desatada por la crisis de las hipotecas.

La operación se efectuó a través de la Reserva Federal de Nueva York, la principal de las doce filiales de la Fed, que en la última semana inyectó un total de 45.000 millones para apaciguar el mercado.

La Bolsa de Nueva York volvió a estabilizarse finalmente, luego de evolucionar en fuerte baja durante la mayor parte de la sesión, en un contexto de temores sobre los subprime: el índice Dow Jones perdió 0,10% y el Nasdaq descendió 0,32%.

El principal índice de la Bolsa de Valores de Sao Paulo, el Ibovespa, cayó este jueves 2,58% a 48.016 puntos, en una agitada sesión con muchas altas y bajas en la que llegó a retraerse 8,11%, en su sexta jornada consecutiva de pérdidas, informó la institución bursátil.