Este sábado 5 de octubre, miles de personas volvieron a congregarse para la 50ª Peregrinación Juvenil a Luján, un evento emblemático de fe y devoción en la Argentina.

Bajo el lema “Madre, bajo tu mirada buscamos la unidad”, los peregrinos caminarán los 63 kilómetros que separan el Santuario de San Cayetano, en el barrio porteño de Liniers, del Santuario de Nuestra Señora de Luján, en una travesía espiritual que, para muchos, simboliza una búsqueda de consuelo, bendiciones y esperanza en tiempos difíciles.

La Peregrinación Juvenil a Luján es una de las tradiciones más profundas de la comunidad católica en Argentina, y este año celebra su 50º aniversario. Durante el trayecto, miles de jóvenes y adultos caminan hacia Luján para presentar sus oraciones y pedidos a la Virgen María, patrona de Argentina.

Para muchos, esta procesión no es solo un acto de devoción, sino también un espacio de reflexión, perdón y unidad, en el que se buscan bendiciones para el presente y el futuro.

El recorrido de 63 kilómetros comenzó en el Santuario de San Cayetano, ubicado en el barrio porteño de Liniers. Desde allí, los peregrinos siguen la Ruta Nacional N°7 hasta llegar al Santuario de Nuestra Señora de Luján.

A lo largo del camino, habrá 50 puestos sanitarios distribuidos para brindar atención médica gratuita, junto con 13 camiones cisterna y 5 puntos de hidratación que ofrecerán agua potable a los caminantes.

Además, en puntos estratégicos, como el Puente de Control y Avenida Nuestra Señora del Luján, se instalarán hospitales de campaña para quienes necesiten asistencia. Este año, como en ediciones anteriores, la solidaridad será clave para asegurar que todos los peregrinos puedan completar el trayecto de manera segura.