Visitó el monumento que recuerda a los muertos de los trágicos atentados del 11 de marzo de 2004 en la estación de Atocha. "Es muy bello, muy expresivo e impresionante", dijo
"Es muy bello, muy expresivo e impresionante", dijo la senadora y candidata presidencial, Cristina Fernández de Kirchner, al visitar el monumento que recuerda a las víctimas de los trágicos atentados del 11 de marzo de 2004 a los servicios ferroviarios de Madrid.
Cristina estuvo acompañada por la Delegada de urbanismo del Ayuntamiento de Madrid, Pilar Martínez, y los dos jóvenes arquitectos que diseñaron el monumento, Esaú Acosta y Mauro Gil-Fornier, cuando ingresó al denominado "Vacío Azul".
Desde esta sala de casi 500 metros cuadrados, ubicada en el vestíbulo principal de la estación de trenes de Atocha, mirando hacia arriba, se pueden leer mensajes de solidaridad con los más de 191 muertos víctimas del ataque, escritos en una cúpula irregular de vidrio en que se erige en el exterior, de 11 metros de altura y 60 toneladas de peso.
A Cristina le impactó en especial uno de los mensajes: "Hace falta mucha fantasía para soportar la realidad", afirmó, mientras lo leía con la mano en su pecho.
La flamante candidata llegó al monumento emplazado en la Estación de Atocha, minutos antes de las 11 local (6 hora argentina), junto al embajador argentino en España, Carlos Bettini, el canciller Jorge Taiana, el embajador español en Argentina, Rafael Estrella, y el vocero presidencial Miguel Nuñez.
La recibieron la Delegada de urbanismo de la ciudad, Pilar Martínez y los dos jóvenes arquitectos que idearon el proyecto, miembros del estudio Fascinante Aroma a Manzana (FAM), ganador entre unos 200 proyectos del concurso convocado para su construcción.
Los jóvenes arquitectos le explicaron a la senadora los detalles del proyecto y cómo había sido concebido.
Uno de ellos dijo que la luz y la transparencia juegan un papel protagonista en el propio homenaje a las víctimas, evitando en todo momento la presencia de elementos opacos.
La luz que ingresa, densa, es la vida, ante la oscuridad de la muerte, se explicó.
Por su parte, la senadora contó a sus anfitriones que cuando el presidente Néstor Kirchner era intendente de Río de Gallegos vivieron un momento muy fuerte al inaugurar el primer monumento a los caídos de Malvinas.
Desde el escenario mismo de la masacre, a Cristina le preguntaron cómo se sentía en ese momento y dijo: "Nosotros también tuvimos nuestra Atocha, no sentimos hermanados con España".
El homenaje de Cristina Fernández coincide con el fin del juicio oral por los atentados, tras casi cinco meses de sesiones en las que la justicia buscó establecer la responsabilidad de 28 presuntos islamistas vinculados con Al Qaeda, en el mayor ataque terrorista de la historia de España.
El 11 de marzo de 2004, entre las 7.37 y las 7.39 de la mañana, estallaron 10 bombas en los vagones de cuatro trenes de cercanías de Madrid, causando la muerte a 191 personas y heridas a 1.824.
Los autores del ataque habían dejado mochilas bombas en su interior y bajaron de los trenes antes de que estallaran en la estación Atocha, en el centro de la capital española, en El Pozo, un barrio obrero de inmigrantes, y Santa Eugenia, otro sector de las afueras de la capital española.