Gigante de EE.UU. entra en el negocio de la telefonía fija argentina
Es Latin Node, que ofrecerá el servicio en ciudades del interior. Se quedó el año pasado con CrossFone Argentina y quiere ganar clientes en la Pampa húmeda
Latin Node acaba de ganar permisos del Gobierno para operar en una nueva tecnología, que permite dar telefonía fija sin desplegar grandes redes de cobre o fibra óptica.
La empresa de telecomunicaciones rankeada entre las 500 firmas más grandes de Estados Unidos encontró así un atajo para competir con Telefónica y Telecom en el país.
La compañía facturó u$s 133 millones en 2006 y se quedó con el 100 por ciento de CrossFone Argentina.
Latin Node había llegado en 2004, en un joint venture con socios argentinos liderados por Daniel Hadad y bautizado DSR Comunicaciones. En 2006, se quedó con la totalidad del paquete accionario de esa sociedad jurídica, dueña de la marca comercial CrossFone.
La semana pasada, la Secretaría de Comunicaciones (SeCom) comenzó a otorgarle bandas de frecuencias para el nuevo sistema, que permite transmisión de voz y datos sin cables, gracias a una antena que cubre hasta un radio de 50 kilómetros.
El resultado es similar al Wi-Fi, pero en forma más extendida. La tecnología en cuestión se llama CDMA 450 y el número hace referencia a la banda de frecuencia del espectro radioeléctrico que se utiliza para las emisiones.
A diferencia de las usadas para telefonía celular (850 Megahertz y 1900 Mhz), la franja de 450 Mhz estaba siendo subutilizada. Por caso, en Capital la explotan algunos radiotaxis, pero en el interior está limpia.
Convencido por empresas proveedoras de equipos, como la ex Lucent (hoy, Alcatel-Lucent) o la china Huawei, el ex secretario de Comunicaciones, Guillermo Moreno, dispuso que fuera usada para dar telefonía fija inalámbrica.
El objetivo era paliar la falta de infraestructura de red de fibra óptica o cobre que todavía padecen muchas zonas del país.
Sin embargo, quienes se interesaron en la CDMA 450 no siempre siguieron un fin altruista, sino que buscaron comunidades que estaban aisladas, pero tenían alto poder adquisitivo. Por ejemplo, Telefónica y Telecom hicieron pruebas en el Delta del Tigre.
Para estas nuevas operaciones, Latin Node, a través de DSR (o CrossFone), usarán otra empresa, llamada Bantel. Esta última ya existía, había sido creada en Córdoba en 2000, por el ex subsecretario de Comunicaciones, Raúl Agüero. Aunque modesta, tenía como gran capital las licencias para la prestación del servicio, tan importantes en el negocio como las frecuencias.